La nena quien ansiaba todo lo anterior ya respiraba en forma convulsiva,  y ya no podía controlar las lujuriosas emociones y escalofríos que le provocaba su sistema hormonal en cada una de sus curvas, necesitaba moverse en forma de apareamiento con mas libertad, necesitaba una buena verga dentro de ella, y ahí estaba el aprovechador policía para calmarle sus ardientes deseos, pero este no paraba de succionarle las tetas y seguir punteándola de costado, mientras ella con su cara descansando en el ancho pecho del vejete solo se dedicaba a sentir y gozar tapándose la boquita para no gritar, como a su vez haciendo sugerentes expresiones de placer en su bello rostro, de pronto abriendo su boca en forma de "o", luego frunciendo y relamiéndose sus carnosos labios con su rosada lengüita, moviendo la cabeza de un lado a otro en el hombro de aquel viejo macho, también con sus cejas enarcadas hacia arriba en señal de deseoso vicio ante la imperiosa necesidad de aparearse con aquel corrupto y viejo uniformado, o con quien fuera.


 


El viejo separándose por fin de su cuerpo y dejando de espolonearla fue bajando por su cuerpo con sus labios y su lengua, había recordado que la nena también tenía una parte en su anatomía aun mas antojable que sus exquisitas chichotas que el había estado chupando, ahora se daría el gusto con esa atrayente vagina casi despoblada de pelos que el ya había declarado como de él, no importándole cuantas vergas ya hayan pagado por perforar aquella sublime ranura de carne que la jovencita poseía al medio de sus muslos.


 


Hasta que el vejete no tuvo su caliente mirada solo a centímetros de aquellos tímidos bellitos negros que esperaban ser peinados por su propia lengua fue cuando noto que la misma colegiala sin que nadie se lo pidiera procedía a acomodarse de espaldas y abrirle sus muslos recogiéndoselos y ofreciéndole su más intima hendidura la cual daba paso al interior de su cuerpo.


 


El viejo en pelotas y puesto en 4 patas en la camita de Yamile Riveros se afianzo con ambos brazos en cada uno de sus muslos abiertos y fue abriendo su babeante bocota para engullir en forma hambrienta la jugosa y femenina grieta de amor que la tierna chamaca por lo general escondía al medio de sus piernotas.


 


Yamile Riveros fue única testigo del delicioso y gratificante recorrido que hiso el moreno viejo con su boca por su estomago fue por eso que cuando lo vio casi llegar a lo mas intimo de su persona instintivamente se abrió de patas, ya que para ella eso ya era parte del erótico ritual que ella tenía que realizar cuando era abordada por cuanto viejo caliente se le había aparecido desde que había cumplido los 18 añitos.


 


Estando caliente y temblorosa fue consciente de como ese extraño sargento iba abriendo su boca para zamparse su núbil vagina de un solo y exquisito tarascón que al sentir esos calientes y gruesos labios devorándola en forma desesperada y como bailaba por primera vez aquella apestosa lengua entre sus carnes vaginales no pudo Yamile Riveros dejar salir de sus labios un fuerte gemido de placer no importándole que su madre o don Benito la pudieran escuchar desde afuera de la habitación,


 


--O... Oh... Ohhhhhhhhhhh...! A... Ah... Ahhhhhhhhhh...! Mmmmmmmm...!  don... Eustaquioooo...  q... que... ri... coooooo... mi... a... a...mooorrrrr...!!!!


 


La enervada nena gemía y se quejaba audiblemente como una autentica puta a la vez que empuñaba fuertemente las ropas de cama, sintiendo una y otra vez en su zorra los desquiciantes lengüeteos de quien es esos momentos se la estaba comiendo.


 


Las febriles succiones en su vagina la hacían sentir muy rico por lo que sin pensársela y a modo de agradecimiento lo compensaba con deliciosos gemidos, y abriéndole las piernas al sargento lo que más le permitieran sus articulaciones.


 


El viejo por su parte con todos los sentidos abocados completamente a la lujuria del momento en aquella ardiente habitación también estaba fuera de sí: la lamia, la chupaba y le succionaba la concha como un verdadero mal nacido, o como un desaforado!, o como ustedes quieran...!!, aquella joven vagina casi  desprovista de pelos que le estaban ofreciendo y que ya se chorreaba constantemente en sus labios, bigotes y lengua lo estaban haciendo perder la razón, el sargento estaba muy caliente, y por su parte la excitada y enloquecida colegiala tampoco se quedaba atrás, con deliciosos gemidos de autentico disfrute se mantenía con su cabeza completamente enterrada en los almohadones de la cabecera en donde alargando su cuello y tensando los ligamentos y venas de este intentaba enterrarla aun mas, su cintura se movía instintivamente con meneos ondulatorios y pélvicos de atrás y hacia adelante, de la misma forma en que lo haría si en aquellos momentos se la estuvieran culeando, o sea, le  estaba entregando todo lo de ella a ese lujurioso uniformado que no paraba de darse ese semejante bacanal de caldos calientes y carnes vaginales que la ardiente colegiala le estaba proporcionando.


 


Hasta que aquel placentero y lujurioso estado en que ambos amantes se encontraban nuevamente fueron diluidos, ya que la puerta de la habitación se entre abrió y claramente escucharon la nítida voz de la señora Isabel que le hablaba a su hija desde afuera y con firmeza,


 


--Yamile Riveros...!!! que está ocurriendo allí adentro...!!??


 


La chamaca con solo escuchar la voz de su madre se quedo como petrificada mirando con sus ojos verdes en dirección de donde venia aquella conocida y maternal voz, totalmente estática y no sabiendo de qué forma reaccionar al igual que el viejo que también miraba en la misma dirección siempre abrazado a los muslos completamente abiertos de la joven, solo miraban hacia la puerta entre abierta del dormitorio en la que en el piso se veía claramente la sombra de de la mamá de la chamaca amenazando como si en cualquier momento fuese a ingresar...


 


(4 minutos antes en el comedor de la casa de Yamile Riveros)


 


La señora Isabel ya casi terminaba de prepararle unas ricas ensaladas a su hija, ya que ella sabía que su nena estaba en la edad en que todas las chamacas se ponen vanidosas con su cuerpo y presentación, y cuando ya las guardaba en el refrigerador para luego darse una ducha antes de irse a trabajar escucho un fuerte gemido que venía de la pieza de su hija, frunciendo el ceño y secándose sus manos en el delantal se fue acercando lentamente a la puerta de la habitación, a la vez que oía como su nena hablaba con alguien entre murmuraciones y quejidos de los más escandalosos, así estuvo por espacio de tres minutos más o menos, escuchando como su pobre hija gimoteaba y se quejaba por que claramente según ella le estaba haciendo algo, hasta que una vez que ya lo entendió todo se dio a poner un punto final a lo que allí estaba sucediendo, en forma decidida abrió la puerta del dormitorio y con firmeza le habló,


 


--Yamile Riveros...!!! que está ocurriendo allí adentro...!!??


 


Isabel se dio cuenta que apenas ella abrió la puerta que daba al interior de la juvenil recamara de su hija todo quedo en el más completo silencio.


 


Mientras al otro lado de la puerta la aterrada y encuerada jovencita ni siquiera atinaba a cerrar sus piernas temiendo lo peor, el viejo por su parte se mantenía tan caliente como al principio, miraba hacia la puerta y a la nena una  y otra vez, en donde la ahora nuevamente y asustada chiquilla le hacía señal de silencio con su dedo índice puesto en sus labios una y otra vez, se imaginaba que el vejete estaba dispuesto a hablar en cualquier momento.


 


Ante el mutismo de Yamile Riveros la preocupada madre se dio a hablarle sin atreverse a entrar ya que ambas siempre habían respetado sus espacios de intimidad,


 


--Hija no es justo que estés sufriendo por ese muchacho... te he escuchado gemir y llorar... de seguro que ese joven te está haciendo sufrir... a mi también me ocurrió mas de una vez a tu edad..., decía la buena señora Isabel suspirando y mirando ahora hacia el techo buscando la mejores palabras de aliento para su chamaca quien según ella estaba sufriendo de amor, --Lo mejor es que si no lo están pasando bien terminen su relación por un tiempo... La acongojada mujer solo escuchaba el pesado respirar de su hija y ante el mutismo de esta termino diciéndole, --Entiende cariño que no me gusta saber que estas triste... quieres que hablemos...?


 


Ante la adrenalina de aquel escandaloso momento, y de saberse desnuda en su recamara y prácticamente acostada con un viejo que le había estado comiendo su panocha a solo metros de donde estaba su progenitora, sumándole a que a este hombre por segunda vez en su vida veía, y con su madre a un pelo de descubrirla en tales circunstancias la aun caliente chamaca no pudo Yamile Riveros dejar salir un fuerte chorro de orina desde su vagina producto del tremendo nerviosismo que estaba sintiendo, el cual impacto en plena cara del entretenido policía que por pura casualidad justo en ese momento le estaba mirando la zorra con la boca abierta.


 


Yamile Riveros una vez recuperada y recomponiéndose de ese rico y erótico percance y escuchando a su mami que ya entraba en cualquier momento, tomo aire  y le grito desde su cama,


 


--Ehhhh... gracias maaa...! pero todo está bien... con Rodrigo solo discutíamos... por favor no pases... estoy algo indispuesta y no me gusta que me veas así...!, la nena aun estando excitada le decía todo esto con sus ojitos cerrados rogándole a todos los santos y a la mismita virgencita de Guadalupe que por favor su madre no hiciera ingreso y la sorprendiera en tan escandalosas condiciones.


 


El viejo viendo que la jovencita se estaba comportando de lo más descarada con tal de que su madre no la descubriera que a ella le estaban chupando la concha se dio a propinarle unas buenas lamidas en esta misma, tratamiento que llevo a la nena a nuevamente dejarse caer en la cama y entre abrir sus hermosos ojos verdes con un vulgar rictus de autentica calentura en su lindo rostro producto de las cosquilleantes y ricas sensaciones que el viejo le provocaba con su gruesa lengua en la parte más sensible de su exuberante belleza y en tan comprometida situación.


 


--Está bien hija, dijo de pronto la madre de Yamile Riveros, --Es solo que no me gusta que sufras... ahora yo me daré una ducha y luego me voy al trabajo...


 


Yamile Riveros de por si estaba muy excitada, pero se quedo temblado aun mas de miedo, estupefacción y de una extraña calentura cuando fue consciente de que el viejo no importándole nada, en el mismo momento en que la madre de ella aun estaba parada en el umbral de la puerta hablándole, este subió por su cuerpo, se concentro y acomodo su verga en la entrada de su vagina y simplemente se la metió en forma impecable.


 


La faena no duro más de cinco segundos, cuando la chamaca escuchaba las últimas palabras de su madre vio al viejo montado sobre su cuerpo, para luego sentir la presión de entrada en su panocha, la dilatación de sus tiernos pliegues vaginales mientras el grueso artefacto vergal se deslizaba hacia su interior hasta que ya se sintió con la verga del policía encajada hasta lo más intimo de su persona, no pudo Yamile Riveros dejar de salir de su garganta un sufrido gemido de aguante en el momento que sufrió la firme estocada que le habían mandado solo a tres metros de donde se encontraba su madre,


 


--Mmmmmmmffff!!!!, fue el quejido de la nena a la vez que sentía como el viejo respiraba pesadamente con su cara y sus bigotes enterrados en su cuello, hasta que nuevamente escucho la voz de su mamá,


 


--Eve... estas bien...?, porque te quejas y quedas callada?, la señora Isabel pre sintiendo que su hija en aquellos momentos la necesitaba más que nunca en la vida debido a como según ella pensaba había vuelto a gemir, ya se estaba aprontando a ingresar a la habitación para consolarla, hasta que luego de unos segundos de silencio la abnegada mujer de trabajo nuevamente escucho la dulce voz de su hija que le contestaba desde el interior,


 


--Bueno maaaa!!!, cuando estés lista... s... solo v... veteeee... p... por ahora solo quiero estar s... solaaa...!, la ensartada chamaca producto de una sulfurante expectación por lo que le había ocurrido reciencito, le contestaba a su madre con una de sus manitas puesta en la boca,  con todo el peso del hombre sobre su cuerpo y sintiendo como le tenían profundamente metida una caliente verga en su vagina.


 


La señora Isabel claramente notaba que la voz de su hija estaba algo distinta a como ella bien la conocía, estimo que la pobrecita quizás desde hace cuanto rato había estado llorando y sufriendo, por lo que determino que lo mejor por ahora era dejarla a solas y que llorara todo lo que quisiera, debido a que pensaba que esa era la única forma en la cual su hija superaría todas las penas de amor que la aquejaban.


 


En el mismo momento en que la pareja noto que la puerta de la habitación se cerraba, el viejo no perdió tiempo en volver a comerle asquerosamente la boca tal como lo había estado haciendo en el momento antes en que fueron interrumpidos en el comedor de la casa, a la vez que comenzó a darle unas firmes embestidas hacia adelante y que Yamile Riveros recibía con su carita llena de gozo enarcando sus cejas por cada apuntalamiento que le ponían.


 


La chamaca ahora ya en forma más bravucona y sin vergüenza debido a la tremenda adrenalina calenturienta que sentía al estar fallándole con semejante canallada a la mujer que le había dado el ser, simplemente se dedico a gemir  y a culiar disfrutando de todo lo que le estaban haciendo, así que aferrándose al grueso cuello del policía, entre besos apasionados y susurros, se daba a animarlo a que este no guardara consideraciones con ella y que le hiciera todo lo que él quisiera,


 


--Aaaaahhhh...   pa... paaaaaapiiiiiiiiii...  que... que... ri... cooooo... Mmmm... c... ca... casi... nos p... pi...llannnnn...!!! ohhh...! ohhh...!! ohhhh...!!! que r... riiiii... cccccooooooo!!!, le decía al vejete mientras se quejaba por cada apuntalada que sentía en su panocha.


 


Yamile Riveros cerraba fuertemente los ojos y se retorcía por cada escalofriante estocada que le mandaban en la zorra, gozaba sin parar de todo aquello, la nena sentía placer en cada uno de sus poros ante la salida situación que estaba viviendo, se la estaban culeando en su misma casa y con su madre en esta misma y para rematarla había estado solo a segundos de descubrirla culiando con un viejo mucho mayor que ella, y que además ella creía haber notado cierto coquetería por parte de su progenitora con aquel aprovechador hombre que en esos momentos la estaba tomando como su mujer, era si como por sus venas en vez de correr sangre fuese una desbocada calentura que pulsaban rápidamente por estas y que le hacían palpitar en forma acelerada su corazón, como a su vez bombearle aceleradamente la parte nerviosa de su cerebro como si este en cualquier momento fuese a estallar en ricas sensaciones de éxtasis y dejarla en tal estado para el resto de su existencia.


 


Para el viejo policía también la situación era tremendamente caliente y lujuriosa, estaba disfrutando con su verga de los más íntimos encantos de una hermosa jovencita y en las mismas narices de su mamá, el solo sentirse en semejante situación sentía en su erecta verga una ansiosa necesidad de eyacular al interior de la vagina que estaba ensartando, además que ya a estas alturas sabia que aquella sabrosa hendidura le seguiría ofreciendo placeres insospechados a medida que la cogida se iba poniendo cada vez más escandalosa.


 


Al mismo tiempo en que el salido sargento seguía culeandola, la besaba, se la comía y la absorbía por su boca, con sus ojos cerrados se decía para el mismo que la chamaca esa que también estaba dando muestras de sentirse muy cómoda con su verga al interior de su cuerpo era una autentica Diosa por la que cualquier macho en estado normal hasta mataría por estar en tales condiciones con ella.


 


--Aahhh...! siiiiiiii...! a... asiii...! Que... r... r... ri... ri... coooo!, gemía Yamile Riveros mientras bajaba y subía su pelvis en forma ondulante al mismo compás en que el viejo uniformado seguía poniéndole firmes estocadas vergales en su jugosa alcancía de carne, en tanto la colegiala se iba poniendo más y más descarada, solo se daba a animar al vejete que la siguiera cogiendo tal como lo estaba haciendo,


 


--Ahhhh... yaaaa... ya.... Ohhhhh...! Así...! Asiiiii...! M... Me... ta... me... laaaa... mas para a... aa... den... troooo... p... pa... piiiii...!, le exigía con su voz bajita para que no la fuese a escuchar su madre, para luego seguir respirando solamente por su boca.


 


La jovencita estando en semejante estado de excitación le hablaba bajo al policía para no ser descubierta, ya que sabía que si su madre ingresaba a la habitación la gratificante cogida que le estaban plantando se iría al carajo, ya no recordaba lo de su reputación, o de lo que podría pensar su amada madre de ella si la sorprendía culeando con un viejo, esos sentimientos en estos momentos le importaban un pepino, solo quería seguir cogiendo y que se la cogieran.


 


El viejo al ser consciente de todo aquello que estaba ocurriendo y saber también en el ardiente estado en que estaba la chamaca, le sabia a delicioso estar culeandola en su propia casa y con su madre deambulando por las demás habitaciones, pensamientos que casi lo hicieron correrse antes de lo que él deseaba, así que concentrándose y conteniéndose intento no hacer muchos ruidos para ir de a poco incorporándose en la cama.


 


Una vez que detuvo sus movimientos de acople se volvió a acomodar justo al medio de aquellas bellas piernas que seguían abiertas para él, para luego extraer su goteante verga de aquella joven vagina que en esos momentos estaba brillantemente humedecida producto de los abundantes líquidos de ambos y de todo tipo.


 


La humeante tranca que a estas alturas parecía de piedra por lo dura que la tenia también estaba mojada por los fluidos de ambos, luego de mandarle un copioso y preciso gargajo el cual impacto en plena cabeza de su verga se la volvió a acercar al tajito rosado que poseía la entregada jovencita poniéndosela justo en la entrada, mientras ella estaba con sus ojitos cerrados esperando a que nuevamente se lo hicieran.


 


El viejo ya un poco mas serenado no decidió seguir disfrutando de lo que la joven le ofrecía, y limpiándose la frente mojada por la transpiración se concentro para ir  nuevamente ejerciendo fuerzas de adentramiento con su cintura por lo que se la fue metiendo y abriendo, como si aquella exquisita vagina de una frágil y hermosa flor se tratara, sintiendo en cada centímetro de su verga unas arrebatadoras sensaciones de deleite jamás experimentadas, esta vez se la metía suave y deliciosamente hasta que noto cuando la caliente colegiala otra vez se la había comido entera.


 


Don Eustaquio cuando ya se supo otra vez ensartado hasta los mismos pendejos de su pelvis, entre caliente y emocionado le dijo muy cerca de su perfumada oreja,


 


--Ayyyyy que  rica almejita es la que te gastas putillaaaa, te llegué hasta el fondo de este rica zorrita que no me querías prestar, jejejej la siento calientita... y pensar que hace un rato te la metí en las mismas narices de tu mami, jejejeje...


 


Diciéndole eso ultimo el viejo se acomodo de una mejor forma encima del ofrecido cuerpo de la chamaca para comenzar a culearla suavecito para que no se escuchara desde afuera, pero si con firmeza, para que enseguida la nena se comenzara a quejar de placer una y otra vez por cada firme estocada que otra vez le estaban poniendo en su caliente conchita, y también aportando con obscenas palabrotas animando en voz bajita a que su nuevo macho no parara de cogérsela,


 


--Massssssss...!! M... Ma... Masssssssssss!! mi... s... sar... gen...toooo... m... me... ta... melaaaa... por la z... zorraaaaa to... do... lo... que p... pue... daaaaaaaa!!!!, le decía la nena mientras lo secundaba con rítmicos movimientos pélvicos y ya aferrándose con sus brazos y manitas a las anchas espaldas del policía, resistiendo en su cuerpo todo el peso de aquel gordo justiciero...


 


--Así putaaaa asiiiiii... muévete mas rico de lo que estás haciendo... que esa otra puta que esta tan buena como tu escuche como culeamos en su casa, jajajajja.


 


La nena a la misma vez que ya estaba culeando en toda ley con el sargento, escuchaba como el viejo uniformado se burlaba de ella y de su madre, en algún rincón de su mente sabía que estaba haciendo muy mal, pero don Eustaquio se lo estaba haciendo tan rico, y sumado a que las sensaciones se multiplicaban por cada palabrota emitida por el vejete haciendo referencia a lo muy puta que era ella  y de lo tan buena que estaba su madre y de la forma en que se la violaría, tal como se lo había dicho hace un rato, simplemente se entrego a aquellas desequilibradas y perversas emociones que la estaban haciendo gozar hasta la insania.


 


--Ayyyyyy... siiiiiii... q... que... p... puta soy... soy una pu... taaa... soy una pu... ti... taaaa!, emitía despacito y en forma entre cortada con su boquita para luego morderse el labio inferior en forma exquisita, algo que ya era tan característico en ella cuando estaba disfrutando de sus bajas emociones.


 


--Jejejeje así es zorraaaa... solo eres una putaaaa... y así como te culio ahorita, me culiare a la yegua de tu madreeee!


 


El viejo se empeñaba en hacerle ver a la chamaca las tremendas ansias sexuales que desde ese mismo día sentía hacia la persona que le había dado el ser descolocándola y sacándola a medias de ese delicioso trance en que este mismo había logrado tenerla, pero ella solo se dedicaba a culear con él en un excitante silencio en donde ahora solo se escuchaban silenciosos y apagados gemidos acompañados del sonoro y cómplice crujir que emitía la cama antes los despaciosos pero firmes movimientos de coito que hacia la pareja sobre ella.


 


(Afuera de la habitación)


 


La buena señora Isabel mientras recién había salido de la ducha se vestía en forma apurada ya que estaba un poco atrasada, vestida con su delantal impecablemente blanco, medias del mismo tono y con un chaleco negro ya se aprontaba a salir a tomar el camioncito que la dejaba justo a una cuadra del hospital en que trabajaba. Aun con su uniforme de trabajo la madre de la chamaca se veía como toda una hembra soberbia e imponente, había que decirlo.


 


Una vez en que estuvo en condiciones salió de su habitación, y estando ya en el comedor abrió su cartera para sacar el dinero que le dejaba a su chamaca para los gastos de la semana, fue en eso que escucho claramente los crujidos de maderas que amenazaban con quebrarse y sonidos de resortes que subían y bajaban en forma rítmica y que venían desde la habitación de su hija, quien se quejaba una barbaridad según ella escuchaba, al mismo son de los rechinidos que hacían los resortes de la cama al estirarse y volverse a juntar, por lo que pensando se dijo para sí misma,


 


--Pobrecita... ahora se puso a hacer ejercicios con tal de olvidar sus problemas amorosos.


 


Y no era que la mamá de Yamile Riveros fuera una estúpida remilgona que no supiera como asociar aquellos morbosos sonidos que hacía la cama y que eran acompañados por audibles gemidos que hacia la nena, sino que ella conocía tan bien los nobles sentimientos de su hija y su tan excelente comportamiento que jamás de los jamases se hubiera imaginado que su intachable y bien portada chamaca en esos mismos momentos se encontraba desnuda tal cual como ella la había traído al mundo, y que se estaba pegando una colosal y desvergonzada culeada con el atento policía que solo hacían un par de horas se había presentado en el domicilio para realizarles una encuesta de seguridad ciudadana.


 


Dejando el dinero en el mueble que siempre se lo dejaba, tomo su bolso y se dispuso a ir a trabajar, pero no sin antes despedirse de su hija...


 


Toc... toc... toc...!!!! --Eve... ya me voy al trabajooo...!! en el mueble te he dejado dinero...!!!


 


Isabel esperaba algo por respuesta de parte de su hija pero lo único que creyó escuchar desde adentro de la habitación es que los fuertes rechinidos de la cama aumentaron una vez en que ella le hablo, escuchando también unos delirantes y apagados gemidos por parte de Yamile Riveros, por lo que creyó entender que su hija al ser tan buena no quería que ella supiera que aun estaba sollozando,


 


--Está bien hija... sigue empeñándote... CON TODO... en tus ejercicios... eso te hará bien... Ya me voy, le grito desde afuera por última vez. Por respuesta lo único que obtuvo fueron unos acelerados:


 


Quichhh!! Quichhh!! Quichhh!! Quichhh!! Quichhh!! Quichhh!!!, sonidos emitidos por los resortes de la cama que subían y bajaban rápidamente.


 


Sin más que hacer y definitivamente ya no obteniendo respuesta por parte de la nena, la atractiva señora que trabajaba en la salud pública como auxiliar de enfermería, se marcho a su trabajo dejando inconscientemente que su hija siguiera culiando todo lo que ella quisiera con el caliente policía.


 


Cuando esto sucedió y cuando la desvergonzada y ardiente pareja escucharon por fin el golpe de la puerta que se cerraba por fuera, dieron rienda suelta a todos sus bajos instintos que hasta ese momento estaban reprimiendo para no ser descubiertos en la forma de lo más desvergonzada en que estaban cogiendo.


 


--Jajajajja por fin su fue la yegua de tu madre zorraaaa, ahora menéate y grita todo lo que quieras perraaaa!!!, bramo el sargento una vez que se supo a solas con la chamaca,


 


--Ahhhhhhhhh!!! ricooooo ricooooo mi sargentoooooo, le gustaaa!? le gusta cómo me culiaaaa!?


 


--Seeeeeeeeeeee malditaaaaaa!!!! Así mismito también me culiare a la otra puta que recién se fueeee, jajajajajaj!!!! Tomaaaa...!! tomaaaaaa...!! tomaaaaaaa...!!!, le gritaba en su misma cara mientras se dejaba caer con su ariete ensartándola y agasajándola hacia adelante por cada metida de verga que él hacía en forma furiosa.


 


La nena excitada como estaba se lo estaba pasando muy rico con el señor Sinforoso, y a pesar de que eso que el decía de acostarse con su mama no le gustaba para nada, aun así el solo imaginarse tal situación y luchando en su mente para no imaginarlo, ni graficar tampoco a su madre con las piernas abiertas recibiendo la verga de aquel aprovechador vejestorio que quien sabe como había llegado a ser un representante de la ley, la enervaban prohibidamente.


 


Pero su mente no le hiso caso e igual le mostro la imagen de su madre, al estar siendo ensartada bestialmente y con el solo hecho de imaginársela en semejante situación, de su conchita salió un abundante chorro de jugos vaginales compensando y bañándole la verga con estos en forma de lo más exquisita para el salido policía quien no imaginaba los pensamientos que la nena tenía en esos momentos.


 


El viejo notando al instante como la nena lo premiaba con sus jugos íntimos, y ya dando señales de estar algo cansado como pudo la fue dando vueltas, para dejarla montada sobre su panza y verga siempre accionando con esta hacia arriba y conminando a la chamaca a que ella cual amazona comenzara también a cabalgarlo.


 


--Y como que no eras puta perra mal nacida!!! si reciencito mismo sentí como me miabas la verga con tus caldos que te salen de la concha jajajajaja...!!!, mira nada mas como estas de mojada sobre todo en la parte de la zorra, jajajaj!!!, y efectivamente la nena estaba totalmente mojada desde su ombligo para abajo, brillando y reluciendo producto de sus propios líquidos emanados, el vejete continuaba con sus salidas, --Vamos admítelo zorraaaa...!! confiésame que solo eres una puta barata y que culias por dinero para comprarte ropaaaa!!!!


 


La nena sabia que ella no era ninguna prostituta y que si hace un rato se lo había admitido esto lo hizo solo por estar en total estado de calentura, pero nuevamente su frágil temperamento la hicieron traicionarse a sí misma y hacer y decir todo lo que el viejo quisiese,


 


--Siiiiiiiiiiiiiiiii soy una p... pu... putaaaaa...!, gimió entre cortadamente a la vez que a medida que dejaba salir de sus labios aquellas viles palabras también comenzaba a menearse sobre la grotesca panza peluda del policía,


 


--Si perra!! solo eres una vulgar puta callejera...!! y desde hoy día solo putearas para mi... lo tienes claro zorraaaa...!? yo te diré en que esquina o callejón deberás trabajar... nos iremos 50 y 50 con el dinero que hagas prestando la conchaaaa, jajajajaj!!!!, le aclaraba el caliente sujeto sin parar de clavarle firmes vergazos.


 


La jovencita quien se mantenía montada sobre el oscuro y peludo cuerpo del viejo que la empalaba, solo se daba a pensar en todo aquello, se imaginaba a ella misma parada en una esquina a la espera de algún hombre que quisiera darle dinero por acostarse con ella, y estando en estos acalorados pensamientos sintió gracias a estos que nuevamente su zorrita se comenzaba a derretir en forma excitante, hasta simplemente otra vez abandonarse,


 


--Ohhhhhh mi s... sa... sargentooooo pa... piiiii mi a... a...morrrrrr... si... siiiii...!!!! solo putiare para Usteddddd...!!!! soy una nena malaaaaa...!!!! muy m... ma... malaaaaaa...!!! clávemela mas fuerteeeeee... y le juro que le hare ganar mucho dinero prestando mi zorraaaaaa...!!!!, le decía Yamile Riveros al vejete entre gemidos y exclamaciones de calentura, evocando las palabras de don Pedro, mientras ella montada sobre su abultado abdomen y con sus tetas aplastadas en su ancho pecho lo cabalgaba como una desaforada y con cara de pura excitación.


 


El viejo sintiendo en su verga todo el éxtasis que la jovencita le proporcionaba con su conchita mientras ella solita se estaba culeando, y teniendo esas tremendas tetas a su entera disposición se dio a agárraselas con sus dos manos: las movía, las juntaba y las apretaba con fuerzas, para luego comenzar a chupárselas, besarlas y sobajeárselas con mas fuerzas, regalándole a la nena tanto dolor como placer al mismo tiempo, ella solo se mantenía galopándolo con las relucientes carnes de sus caderas subiendo y bajándolas por su verga en forma vibrantemente enajenante.


 


Yamile Riveros en un momento de su cabalgata y cuando vio al viejo resoplando de calentura con sus bigotes mexicanos, simplemente aminoro el ritmo de sus febriles movimientos para luego y manteniéndose bien clavada a la verga del policía con ambas manos se dio a acariciar el peludo pecho de este a la misma vez que se lo besaba y pasaba su lengüita subiéndole por el cuello y lamiéndole notorios ríos de traspiración, para luego tragarse todo eso que ella retiraba con sus labios y su lengua.


 


Plaffffff!!!!!!, retumbo una fuerte y doble nalgada que el enojado vejete le asesto en ese tremendo y brilloso culaso,


 


--Quien te dijo que pararas de moverme el culo putaaaaa!!!!! vamos meneándote zorraaaaa... empieza a revolcarte igual que hace un rato... que para eso es lo único que sirves encuinclaaaaa hija de putaaaa!!!!, y diciéndole esto último se dio a mandarle una serie de fuertes nalgadas, a la vez que el mismo se las tomaba para levantarla y dejársela caer sobre su duro y empinado mástil, a la vez que alternaba con sonoras y fuertes palmadas,


 


Plaffffff!!!!!! Plaffffff!!!!!! Plaffffff!!!!!! Plaffffff!!!!!!


 


Cuando la excitada y algo asustada chamaca nuevamente ya iba tomando el ritmo de la cabalgada sintió como fue fuertemente empujada hacia un lado de la cama, vio al viejo ponerse de pie en esta misma con su erecta verga apuntando y encorvada hacia el techo,


 


--Bien puta... debo decirte que culias exquisito... se nota que eres buena en el negocio, pero ahora de rodillas y vamos chupando la verga, jajajajaj, le decía mientras se la jalaba al frente de los ojos verdes de la chamaca.


 


Pero nuevamente el vejete no le dio tiempo de reacción ya que fue el mismo quien agachándose la tomo y jalo fuertemente de los cabellos para obligarla y zarandearla hasta ser el mismo quien la puso de rodillas en la cama, una vez que ya la tuvo como el quería le dio una serie de vergazos en el rostro, para decirle...


 


--Abre tu boquita zorraaaa...! ahora me mamaras la verga mejor de como lo haces con tus clientes, jejejeje. La nena había sido tomada por sorpresa y aun no atinaba a cómo reaccionar, por lo que el sargento viendo que Yamile Riveros no seguía sus instrucciones como él quería volvió a bramar, --Que abras la boca putaaaa!!! acaso estas sordaaaa!!??


 


Yamile Riveros teniendo la erecta verga del viejo justo en sus narices la vio tal como era: gruesa, grande, quizás de unos 20 centímetros, la notaba morena y tenía todas las venas remarcadas y pulsando de excitación, se le notaba durísima pensaba la chamaca para sus adentros no importándole el trato déspota que estaba recibiendo por parte de aquel corrupto representante de la ley.


 


Ya no aguantando mas tanta tentación y en un acto netamente de autentico instinto subió una de sus manitas para agarrarla desde la misma base poblada de pendejos negros, y cuando ya se aprontaba a pasarle su lengüita como si esta fuese un rico helado, nuevamente escucho la voz del viejo,


 


--Ajaaaa!!... no te dije que la tomaras con la mano... solo dije que abrieras tu boca putaaa...!!! tu sí que eres mensaaa, jajajaja!!!!.


 


Una vez que la colegiala retiro su manita de donde la había puesto miro desde su posición al vejete y tal como si ella fuese una buena y obediente niña abrió su boquita esperando a que el policía hiciera lo que tenía en mente...


 


--Así está mejor putita... así está mejor... vamos ahora saca tu lengüita lo que más puedas, le decía sin dejar de masturbarse el mismo, su visión era celestial, desde su ubicación veía como esa dócil hembrita se mantenía desnuda y de rodillas en la cama con sus muslos abiertos solo un poquito y ahora apoyada con sus dos palmas en la cama y con su lengüita tan afuera como podía sacarla, tal como lo haría una sumisa perrita.


 


El vejete ya no aguantándose mas poso su grotesca verga en la fresca lengua de Yamile Riveros para luego proceder a tomarla con una de sus manos por la parte baja de su mandíbula inferior, y con su otra mano enrollarse una buena parte de sus cabellos haciendo con esto que al ir metiéndole la verga en la boca afianzársela firmemente por la nuca, y cuando ya se la tuvo metida hasta la mitad de un solo empujón se la ensarto en forma completa.


 


Yamile Riveros apenas podía respirar, agitaba su cabeza y su cuerpo en desesperados movimientos en busca de oxigeno, pero el viejo no la soltaba, le puso tres fuertes arremetidas para sujetarla y no permitirle que se sacara ni un centímetro de verga de su garganta, el ahora fiero policía sudaba a mares.


 


Una vez que la nena pudo recobrar la respiración por la nariz, aunque en forma dificultosa, sintió como el viejo comenzaba a jalar su cabeza hacia atrás, pero solo lo hiso hasta la mitad, para luego de esto volver a metérsela hasta traspasar la campanilla de sus amígdalas, la operación se repitió unas cuantas veces.


 


Luego de unos asfixiantes minutos en que la nena había sobrYamile Riverosvido a tan bestial tratamiento ya lo secundaba al haberle tomado el ritmo al asunto, aunque por la comisura de sus labios se filtraban y caían cuantiosas cantidades de babas, otras escapaban por ambas fosas nasales, que de vez en cuando estas eran absorbidas por la atragantada nena para después volver a botarlas hacia afuera, siempre por sus conductos nasales.


 


--Bien puta...! eso es...!! así... así...!! Así!! así es como a mí me gusta...!! que me chupen la verga...jajajaj!!!, le decía moviendo la cabeza de la chamaca de atrás y hacia adelante en forma acelerada, --Ahora te soltare y quiero que me mames la verga solo con tu boquita y sin retirártela hasta no más de la mitad... y nada de manos...!!! eso es para putillas novatas, y tú con solo cobrar por hacerlo te convierte en una puta profesional... así que ya sabes...


 


Diciendole esto último el vejete la libero de sus manazas dejando a que a ella solita comenzara a chuparle la verga como el quería.


 


La carita de Yamile Riveros en esos momentos estaba de lo más deplorable, de sus ojos caían copiosas cantidades de lagrimas debido a los continuos atoramientos y a la falta de aire, a esto se sumaban los gruesos cordones de babas mezcladas con semen que le salían disparadas de vez en cuando por sus narices, estas caían y se juntaban con las que escurrían de la comisura de sus labios y que luego colgaban por su barbilla y se le deslizaban por las tetas hacia abajo.


 


La escena era tan asquerosa como morbosa, ya que la gruesa verga entraba en forma apretada en aquellos sensuales y rojos labios debido al exagerado grosor de su circunferencia, pero Yamile Riveros a pesar del inmenso dolor de sus mandíbulas y al sentir que en cualquier momento se las dislocaban, ya estaba casi saboreando aquellos conocidos sabores a verga salada y pasados a orinas, intentaba tragarse lo que mas podía de todos aquellos líquidos que salían de la tranca del uniformado, lo mismo con las grandes cantidades de babas y hiel que se le formaba en su paladar al encontrase nuevamente con su boca llena de verga, por lo cual una vez que tragaba todo lo que podía de esos asquerosos y fuertes líquidos se daba a succionarla moviendo frenéticamente su cabeza de atrás y hacia adelante tal cual como si de verdad quisiera sacarle en forma anticipada todo el semen que esta pudiera proporcionarle, y como también queriendo que el viejo sintiera muy rico.


 


Luego de unos minutos en que la entregada y vejada jovencita se dio a mamarle, chuparle y succionarle la verga al sargento como una verdadera profesional y viendo que este se encontraba con sus ojos cerrados y entregado a todas aquellas sensaciones que ella le regalaba con sus labios y su lengua se atrYamile Riverosó a nuevamente tomarla desde la base con su manita para sacársela de la boca y quedar mirándola con sus ojos verdes semi abiertos, de sus labios caían copiosas cantidades de babas que algunas aun se mantenían en forma de puente uniendo sus labios con el aceitoso glande del vejete, veía tan antojable aquella vergota que ya no aguantándose mas comenzó a pasar su lengua por aquella herramienta tal cual como si esta fuese una paleta, le lamia y le comía con fruición los testículos como si estos fuesen unos duraznos en almíbar, para luego volver a metérsela en forma golosa en la boca, no se cansaba de recorrerla con su lengua desde las bolas hasta la cabeza, luego repetía la operación pero por el otro lado de aquel grueso instrumento, y así se la estuvo mamando hasta que el policía se dio por satisfecho y la paro.


 


--Muy bien zorra... eres toda una experta a la hora de mamar la verga, jajaja, pero ahora te quiero en 4 patas putaaaa... tu concha aun la mantienes apretadita cosita, no sabes cómo me hiciste sentir hace un rato y ya quiero lo mismo, jejejeje...


 


Yamile Riveros a quien aun le colgaban vistosas cantidades de líquidos pre seminales desde sus labios rápidamente se puso como las perras, la calentura en su cuerpo se negaba a abandonarla.


 


El vejete notando la rapidez en que la jovencita se puso en posición quedo encantado y feliz,


 


--Pero mira nada mas lo bien puta que te pones para tus cosas a la hora de culear, jejejeje que rico que también te guste hacerlo gratis... y que bien me paras ese tremendo culo que te cargas putita, le decía el viejo con cara de estar verdaderamente impresionado con la actitud de la chamaca...


 


La nena quien se encontraba en el limbo de la calentura secundaba al vejete en todas sus ocurrencias,


 


--Le g... gustaaaaa mi... t... tra...tra... serooo!?, le preguntaba mirándolo hacia atrás y con una extraña sonrisa en su traspirada carita...


 


--Si putaaaa...me encantaaaa... tienes el tremendo culoooo!!!


 


--En... ton...ces... de... mués... tre... me...looooo... c... cla...cla... ve... me su v... ver... gaaaa!!!, ni siquiera la misma Yamile Riveros era capaz de creer que aquellas palabrotas estuviesen saliendo de sus propios labios.


 


--Claro que lo hare putitaaaa... y como me calientas con tus puteadas, jajajaja!!!, este es el mejor culazo que he visto en mi vidaaa, lo tienes grande y paraditoooo... Mmmmmm mi verga ya urge por nuevamente internarse en tu concha perraaaaa...!!!


 


El viejo ya estando en posición y arrodillado detrás de ella, se mando el mismo un zendo escupitajo en su mano, lubricó con esta todo el contorno de su gruesa herramienta, para luego hacer lo mismo en la humedecida grieta de la nena, aunque al parecer esta no lo necesitaba, luego apoyó su verga en la misma abertura intima de la caliente joven y nuevamente se lo mando a guardar sin ningún tipo de consideraciones.


 


La sensación para la chamaca fue maravillosa al sentir cómo su zorrita nuevamente se había engullido una grotesca verga, la sentía tan dura como si le hubiesen metido un gran palo, el vejete por su parte y caliente hasta la locura no perdió tiempo y nuevamente comenzó a accionar de atrás para adelante a la misma vez que se iba echando con panza y todo sobre la suave espalda de la chamaca quien se mantenía imperturbable puesta en cuatro patas si como el peso del viejo no le afectara en lo mas mínimo, solo se daba a sentir como el vejete le chupaba la oreja y le lengüeteaba el cuello y sus hombros sintiendo su pesada respiración en distintas parte de su nuca, lo que la llevaban a parar mas el culo de lo que ya lo tenía, quería que el buen sargento se llevara una buena impresión de ella.


 


El viejo quien se sentía enterrado hasta más no poder en el curvilíneo cuerpo de tan exquisita putilla se daba a preguntarle,


 


--Sientes mi verga putitaaaa!? La sientesss!!??


 


--Siii…! s... si...!! si... gaaaaa... m... me... ta... me... laaaaa... mas... p... pr... prooo... fun...dooooo por f... fa... vorrrrr!!!, la nena le decía esto al viejo comenzando ella misma también a menearse hacia atrás, y cuando sentía que sus nalgas chocaban con la dura pelvis del viejo ella misma meneaba sus nalgotas hacia los lados si como con esto ella fuese a comerse y tragarse para siempre la gruesa vergota del policía.


 


De a poco los movimientos de ambos se comenzaron a hacer mas frenéticos y escandalosos, Yamile Riveros movía el culo si como su vida dependiera de ello, mientras sentía como el viejo la ensartaba con fuerzas descomunales, este había pasado sus brazos por debajo de aquellas tremendas tetas que colgaban en forma alucinante, a la vez que se afianzaba de ella con estas mismas, se movía de adentro y hacia afuera sin sacarle la verga en ningún momento en forma completa, mientras la traspirada nena gemía y gritaba sintiendo nuevamente como era ahora otro hombre el que en cualquier momento la fuera a romper por la zorra.


 


--Ayyyyyyy...!! p... paaaa... piiiiiiii!!!!, q... queee riii... caaaaaa es su v... ver... gaaaaaa!!!!, los negros y casi azulados cabellos de la nena le tapaban y despejaban la cara por cada acelerado empujón que el sargento le daba por la retaguardia, mientras este mismo y a la misma velocidad de sus embates no se cansaba de bufar y resoplar gritándole,


 


--Ohhh... siii...!! Ohhh... siii...!! Ohhh... siii...!! Ohhhhh siiiiii...!!! Ohhhhhh siiiiiiiiiiiiiiiii...!!!!!, bramaba el viejo como un verdadero cavernícola, como ya bien se dijo, por cada bestial arremetida con que la clavaba, --Mmmmmmm... gritaaaaa...!! gritaaaaa desgraciadaaaaa...!!!! gritaaaa todo lo que quieras zorraaaaaaaaaa...!!!!


 


--Ayyyyyyy...!!! ayyy p... pa...pi…!!! de... me... mas d... duro...!!! m... mas... mas... r... re... reciooooo...!!! c... cu... lie...me mas... f... fi... fir... meeeee...!!!!


 


--Cómo te gusta que te culien zorraaaaaaaa...!!! mira como me sorprendes con tus ricas puteadasssssss!!!!! Ohhhhhh siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!!, volvía a gritar preso por la mas degenerada calentura.


 


El viejo escuchando como aquella atractiva mocosa de ojos verdes que el mismito había sorprendido puteando por sus calles y que en esos momentos  pedía de la forma más desvergonzada a que él se la culiaran como quisiera, ya lo tenían hirviendo de la más perversa calentura y sabia que le quedaba muy poco, por lo que la bombeaba cada vez más fuerte con sus manazas clavadas en las relucientes ancas de la chiquilla, por lo que como pudo la fue corriendo hasta la orilla de la cama, siempre puesta en 4 patas, hasta lograr el mismo bajarse del juvenil lecho poniendo ambos pies en el suelo pero sin sacarle por nada del mundo la verga de su panocha.


 


Yamile Riveros lo secundaba casi por instinto. El enardecido policía concentrándose en lo que quería hacer metió las manos por debajo de su estomago para volver a afianzársela agarrada de las tetas, tenso todos los músculos de su cuerpo y la fue levantando siempre clavada en su virilidad hasta que la tubo como el quería.


 


Yamile Riveros se vio en el aire y elevada en los fuertes brazos del sargento Eustaquio Sinforoso, para no caerse la nena buscaba en forma desesperada con sus brazos hacia atrás el cuello del viejo, pero este al ser bastante chico para ella nunca lo encontró, hasta que lo vio asomarse por debajo de su axila con toda su cara traspirada y con cara de estar muy enojado, todas las venas de su frente pulsaban como si fuesen a estallar.


 


La nena no supo en qué momento quedo en el aire y de espaldas a él, pero sabía que el policía le tenía clavada la verga profundamente en su vagina, notando así que su macho tenía tantas fuerzas que la subía y la bajaba con su verga clavada en ella como si nada le costara, ahora con sus dos manazas pasadas por sus piernas, el desesperado viejo movía su apéndice en forma desenfrenada, y la chamaca lo secundaba con su cara llena de éxtasis ondulando y meneando su pelvis, a la misma vez que recogía y abría sus muslos por cada electrizante clavada que le ponían hacia arriba.


 


De un momento a otro el vejete la volvió a arrojar a la cama, sus cortas piernas aunque robustas, le temblequeaban por tal osadía que acababa de realizar con tremenda hembra, pero había sido un gusto que él se quiso dar.


 


La chamaca no sabiendo bien que es lo que pasaba ahora, ni tampoco como había ido a dar a la cama se despejaba sus mojados cabellos de la cara, en eso fue que sintió nuevamente todo el peso del corrupto policía que otra vez se echaba sobre ella y se lo mandaba a guardar sin darle prYamile Riveroso aviso, a la vez que escuchaba como este nuevamente se daba a decirle palabrotas que a ella le gustaban, mientras este no paraba de arremeter duro contra su cuerpo,


 


--Te vendré a ver bien seguido putaaaa...!!! Ohhhh que bien me aprietas la verga con tu conchaaaa...!!! Yamile Riveros lo escuchaba con su carita desfigurada por la calentura aguantando sus arremetidas, --Eres deliciosa zorraaaaa...!! si no fuese casado te juro que te hubiera hecho mi esposaaaa...!!! Ufffffff...!!! tomaaaaaa!!!!!


 


Yamile Riveros sintió una fuerte clavada de verga por parte del viejo, pero no se le había ocurrido pensar en aquello ultimo, este viejo también era casado!? Y al caer en cuenta que ella misma estaba nuevamente culeando con otro hombre casado su nivel de excitación pareció aumentar a mil por hora, por lo que sus caderas y cintura comenzaron a moverse en forma desquiciante, la chamaca quien se aferraba al ancho pecho de su macho casado sintió como aquella verga la estaba llevando a la gloria, mientras más fuerte se la clavaban ella más firme y rápido se movía secundándola, hasta que su sistema nervioso ya no respondió mas, simplemente la jovencita sintió que explotaba del placer prohibido al sentirse solo un objeto de deseo para viejos casados y aprovechadores.


 


El vejete veía como la nena comenzaba a gemir y a moverse en forma más agitada sintiendo el mismo como los nervios de la chamaca se estiraban al máximo producto de la calentura y del orgasmo, y cuando le iba a plantar otra tanda de insultos y vulgaridades la ajustada panocha de la hembra le hiso una mala jugada haciendo que se corriera en un intenso orgasmo.


 


--Ahí te voy zorraaaaa...! creo que me corrooooooo...!! Ohhhh siiiiiiiiiii...!!! Tomaaaaaaaa...!!!! Arghhhhhhhhhhhhh...!!!!! gruño fuertemente el policía cuando sintió que le salió expulsado de su verga el primer lecherazo de mocos.


 


El sargento en sus últimos segundos de contención se dejo caer como un embravecido y ya estando enterrado en lo más profundo e intimo de la vagina de Yamile Riveros le soltó un fuerte y blanco cordón de semen que duro 10 segundos exactos desde su salida de la verga hasta que se corto para dar paso a los siguientes.


 


En esos electrizantes 10 segundos para el viejo, este primer cañonazo de espeso y blanco semen no menguo ni en fuerzas ni en cantidad en dejar salir de su verga su vigoroso simiente, depositándolo en lo más profundo del estomago de la nena, el cual fue secundado por otras tres inyecciones del blanco líquido de parecidas características, y terminando ya con otros cuatro pero de menor intensidad y cantidad, hasta que ya a sabiendas que no tenía nada más que entregarle a la chamaca que había convertido en su mujer simplemente se desplomo a un lado de su cuerpo dejándola semi inconsciente y con sus portentosas piernotas abiertas y temblorosas, con su vagina chorreando muy pocas cantidades de semen, ya que casi la mayor parte de esta esencia había quedado depositado al interior de su cuerpo.


 


Al rato el viejo ya se vestía mirando el desnudo cuerpo de la chamaca, quien ella poco a poco volvía a la realidad, la tremenda excitación que había sentido en las últimas dos horas ya daban paso a sentimientos de pesar, angustia y arrepentimiento, sumado con lo que ahora le decía aquel horrendo policía,


 


--Que rico mami... nunca imagine lo tan buena que eras para la cama, jajajaja, me la pase fenomenal, y con gusto me hubiese quedado a dormir contigo como si fueras mi vieja, pero como no tuve tiempo de ir a las estación olvide avisar en casa, jejejeje, tú ya sabes cómo son las mujeres decentes y casadas, no son como ustedes las putas que son mas descocadas, además teniendo 7 hijos y todos preguntando por su papi, así que imagínate, jejejeje!


 


La chamaca entre medio de todos sus sentimientos de odio, ponía atención en lo que el viejo le decía, ahora lo veía metiéndose la camisa en los pantalones del uniforme,


 


--Es Usted un desgraciado, como le hace esto a su esposa y a sus hijos..., la nena ni siquiera pensaba en ella, ahora estaba preocupada por la familia de aquel canalla que prácticamente se la había violado.


 


--Jajajajaja... eso a ti no te importa putilla... tu solo preocúpate de abrirte de patas cuando yo te lo ordene o cuando tus clientes te paguen por ello..., jejeje...


 


--Yo no soy una prostituta como Usted cree..., le dijo la nena recordando los motivos por los cuales nuevamente había caído en las garras de otro viejo aprovechador.


 


El viejo ya ordenándose la ropa vio a la jovencita aun desnuda en la cama pero tapándose sus partes nobles con cada una de sus manitas, se sentía orgulloso el mismo de haberse cogido tan tremenda hembra, su hombría y virilidad las tenía por las nubes en aquellos momentos,


 


--Pues si no lo eres... entonces eres una nena perversa...! o una pendeja calienteeee...!! o como quieras, pero que no se te olvide que yo mismito te vi puteando, así que no le sigas con eso, a mi no me convencerás con tus chingaderas, jejejeje. Ahora me retiro, y recuerda cada vez que te sorprenda en la calle, me deberás dar el 50% de tus ganancias te aseguro que desde hoy nadie te molestara y puedes trabajar en la esquina que tú quieras... Nos vemos el domingo, jajajajajaj!!!!.


 


Luego de eso ultimo el viejo simplemente se fue.


 


Yamile Riveros cuando por fin se vio a solas corrió rápidamente a poner la tranca que había habilitado don Benito en la puerta de su casa, no fuese  hacer que ahora se le metiera don Lucas como en una ocasión ya lo había hecho, temía la arrepentida colegiala, al menos por ahora ese asqueroso policía ya se había retirado pensaba limpiándose las lágrimas de sus hermosos ojitos verdes y mientras ríos de semen bajaban lentamente por sus muslos.


 


Al siguiente día y ya algo recuperada del tan agitado día lunes, y luego de haberse dado una recuperadora ducha con agua caliente, la imponente colegiala ya vestida con su hermoso uniforme escolar se aprontaba para irse a clases.


 


Fue que al salir de su casa y cuando ya se encaminaba al paradero para tomar el bus otra desagradable situación se le presentaba mortificándola aún más, en sus oídos retumbo esa otra aguardentosa voz también conocida por ella,


 


--Pero que es lo que tenemos aquí?…, si no es mi arrendataria favorita!?, jajajaja...!!, reían los dos viejos miserables de don Lucas y el gordo Anselmo, quienes en esos momentos le estudiaban en forma lujuriosa todos sus encantos y con ojos de verdadera calentura sin ni siquiera disimularlo, estos habían aparecido sin prYamile Riveroso aviso desde el cercano callejón que estaba a un lado del bar de don Lucas.


Fue que al salir de su casa y cuando ya se encaminaba al paradero para tomar el bus otra desagradable situación se le presentaba mortificándola aún más, en sus oídos retumbo esa otra aguardentosa voz también conocida por ella.


YAMILE RIVEROS 14


 


--Don Lucas… como esta?, Yooo... yo en este momento ya me iba al colegio, la chamaca estaba aterrada,


 


--Tú no te vas para ningún lado mamasota…! jajajaja…!! hasta que no me digas en que andaba la poli ayer en tu casa!, y te recomiendo que me digas la verdad, acabo de llegar esta misma madrugada y mis informantes ya me dieron conocimiento de todas las novedades que ocurren en mi ausencia... así que vamos cantando... desembucha pendeja...!!!


 


--Ehhhh… solo andaban haciendo una encuesta…, la atribulada jovencita contestaba con una de sus manitas agarrando su mochila en su hombro y mirando hacia el suelo, les tenia terror a ambos delincuentes,


 


--Y encuesta de que preciosura...!?, si es que se puede saber, le dijo el viejo Lucas ubicando su cara frente al rostro de la asustada colegiala, a quien acorraló contra el muro de la calle, en donde Yamile Riveros pudo sentir el asqueroso olor a alcohol rancio y tabaco en el hedor de su aliento,


 


--Era algo sobre aumentar el control policial en el barrio…, dijo mirando hacia un lado, temiendo que en cualquier momento ese viejo asqueroso le iba a estampar un beso, además que alguna persona conocida de su madre fácilmente la podría ver,


 


--No te creo pendejaaaa…! dime la verdad si no quieres que algo muy malo te pueda ocurrir a ti, a tu mami, o al viejo ese que se las da de vivo con Ustedes dos, jajajaja.


 


La chamaca levemente subió su mirada para cruzarse con la del viejo, en donde solo veía el brillo de la maldad en estos, por lo que se dio a reafirmar sus dichos,


 


--Es verdad don Lucas… se lo juroooo…!


 


--No le creas Lucas… esta zorra está mintiendo, ese pinche policía andaba en otra cosa, y esta encuincla no nos quiere decir, atribuía el gordo Anselmo, no porque él estuviera seguro de lo que decía sino por aleonar a su jefe a ver si en una de esas se la podían llevar para alguna parte y violársela como tanto él lo deseaba,


 


--Jajajaja escuchaste pendeja!?, aquí este gordo asqueroso no te cree nadita… que me dices?, a quien le debo creer? A ti?... O a mi amigo el gordo!?,


 


Yamile Riveros quien ya se estaba comenzando a desesperar por lo muy cerca que tenía a ese viejo repugnante, solo atino a seguir jurándoles, y ahora también refiriéndose al gordo Anselmo…


 


--Señor Anselmo, de verdad que yo no les miento… se los jurooo…!


 


--Suficiente!, corto don Lucas, a quien no le pareció que la buenota de Yamile Riveros ahora se dirigiera al gordo, para luego decirle, --Yo te creo pendeja… por ahora nos retiramos… pero recuerda que nosotros dos tenemos algo pendiente, jajajaja… cualquiera de estos días me dejo caer por tu casa para repararte los artefactos, jajajajaja...


 


--Don Lucas todos los artefactos de mi casa están en perfectas condiciones así que no creo que sea necesario que Usted se moleste en...


 


Un fuerte sonido de música de celular interrumpió la dulce voz de la nena, que lo único que deseaba en esos momentos era que esos dos viejos asquerosos de una buena vez la dejaran tranquila.


 


--Y quien mierda me llama tan temprano??!!!, bufo don Lucas a la misma vez que sacaba el celular de uno de sus bolsillos y les hacía señas a Yamile Riveros y al gordo Anselmo a que lo esperasen, --Alooooo...!!!, contesto con el mismo rugido de un león.


 


El delincuente al escuchar la voz de otro de sus contactos en el centro de la ciudad se alejo un poco de sus acompañantes para que estos no lo escucharan hablar sobre sus otros negocios.


 


La nena quedo aterrada al verse a solas con el gordo Anselmo, ese viejo calvo con cicatrices en la cara y con una tremenda panzota cervecera sin duda alguna la tenían espantada y sumándole todas aquellas historias de homicidios, violaciones y drogas que pesaban en su curriculum, hicieron que imperiosamente ella deseara la presencia del buen Sargento Sinforoso, o de don Pedro, se decía la chiquilla, o tal vez la de don Severiano, o hasta el cojo Juan a torso denudo y con su pala le servían para que la defendieran de tan asqueroso y malvado sujeto.


 


--Jejejejej porque te quedas calladita lindura?, acaso me tienes miedo...?, le consultó de pronto el viejo Anselmo notando el estado en que se encontraba la joven con el solo hecho de estar a solas y ante su presencia,


 


--Es que...es queee...ya me tengo que ir al colegio señor Anselmo...,


 


--Tu no te vas hasta que Lucas no te autorice para ello, y ahorita el está algo ocupado... recuerda que tu eres de su propiedad, jejejeje...


 


La nena pensaba temerosamente en las palabras que le decía aquel horrendo viejo, y desde cuándo que ella era propiedad de don Lucas?, se preguntaba, hasta que el viejo Anselmo nuevamente la sacaba de sus cavilaciones,


 


--Aprovechando que el jefe está un poco ocupado... que tal si un día de estos te hago una visita en tu casa preciosura, te cargas unas tetas exquisitas, y el culo que tienes es para ir a tirar juegos artificiales, jejejeje, que me dices? te gustaría que lo pasáramos rico un día tu y yo solos, tal como estuviste hace un tiempo con Lucas en tu habitación?.


 


El viejo había sido testigo indirecto tras el espejo el día en que el viejo desalmado de don Lucas había intentado cogérsela, y había visto también como la chamaca se había excitado a tal grado que casi estuvo a punto de dejar a que se lo hicieran, y lógicamente el también quería parte de esa torta.


 


Yamile Riveros quedo impactada con las palabras del viejo Anselmo, como era que él sabía lo que había pasado entre ella y don Lucas?, se preguntaba intentando mirar hacia cualquier parte mientras sentía en su cuerpo la degenerada mirada de aquel delincuente.


 


--Ehhh... Ehhh... no sé de qué me hablaaaa..., le dijo finalmente intentando parecer lo más normal posible.


 


--No te hagas la imbécil conmigo chamaca...! yo se que estuviste acostada y encuerada con Lucas... y yo quiero lo mismo, así que dime cuando puedo ir para que lo hagamos.


 


El viejo Anselmo sabía que no podía llegar y violarse a Yamile Riveros como a él le hubiese gustado, puesto que si así lo hacía lo más seguro era que iba a tener problemas con don Lucas, por lo tanto tenía que lograr de alguna forma que la chamaca cediera por las buenas. Por lo que se dio a continuar presionándola para ver si la pendeja esa aflojaba,


 


--Vamos pendeja... que dices...? No es justo que tu madre y tu ya se hayan acostado con Lucas y yo no toque parte de ello, te prometo que si lo haces nunca más te molestare, jejejeje y si quieres hasta un buen dinerito te puedo dar con tal que pasemos una tarde acostados, jejejeje...


 


La chamaca pensaba que ella ni loca, ni tampoco por todo el dinero del mundo se iba a acostar con tan detestable sujeto, pero eso que hablaba de su madre no le caía en gracia para nada, ella sabía de las historias que por ahí se hablaban entre su madre y don Lucas, pero ella la conocía bien y sabía que su abnegada progenitora nunca habría caído en la bajeza de engañar a su venerable padre con tal canallada, y armándose un poquito de valor le contesto al viejo intentando ponerlo en su lugar,


 


--Eso que Usted dice no es verdad... mi mamá nunca le habría hecho algo tan horrible a mi padre..., le dijo mirándolo por primera vez directamente a los enrojecidos ojos del viejo Anselmo,


 


--Pus si lo hiso preciosura...! y lo hiso por años...!!, jajajjaa, acaso no te han llegado los rumores que hay en todo el vecindario...?


 


Luego de pensar esto por unos segundos a la nena no le quedo más que reconocer de los comentarios que por ahí se comentaban en voz baja,


 


--Si... algo he escuchado pero son mentiras..., la nena nuevamente bajaba su rostro algo sonrojado, ya que sabía algo sobre esos rumores, pero para ella no eran más que solo eso... rumores.


 


--No seas idiota pendeja... y quítate la venda de los ojos, Isabel ahora se hace la santita, pero a tu edad y hasta no hace mucho tiempo era la zorra del vecindario aprovechándose de lo muy buenota que estaba, jajajaja...


 


Yamile Riveros herida hasta el alma por las peladeces y vulgaridades en que el viejo se refería hacia su mamá la seguía defendiendo de aquellas viles falsedades,


 


--Yo no creo eso que Usted dice... mi mama no es así...


 


--A ver zorraaa!? acaso me estas llamando mentiroso!?..., el viejo la quedo mirando con cara de perro con rabia...


 


--No es eso señor Anselmo... es que yo... yo no creo eso que usted dice sobre mi...


 


--Y si te lo demuestro!!!, le corto el vejete... --Estarías dispuesta a acostarte conmigo... si te demuestro que tu madre fue la puta de Lucas...!!??


 


--Es que no es necesario, ya que eso nunca ocurrió..., la chamaca ya estaba que se largaba a llorar,


 


--Estas dispuesta a apostar chamaca...!!!???


 


--Es que usted perdería...


 


--Hecho pendejaaaaa...!!, le contesto el viejo si como con lo ultimo dicho por la joven ella daba por aceptada la apuesta, --Dame un tiempito y te demostraré lo muy puta y buena para andar parando vergas que era tu mami cuando tu papi aun estaba vivo... jajajaja...!!!


 


--Es que yo... no se...


 


--Silencio que ahí viene el jefe, y nada de andar abriendo esa boquita de zorra que tienes y que muy pronto me chupara la verga... mira que o si no!!, el viejo se levantó la camisa para que la atribulada chamaca viera el pistolón que portaba entre sus pantalones y su panza. --Tu solo espera y yo te avisare para cuando.


 


Don Lucas una vez que termino de negociar una propuesta de trabajo, se fue acercando a donde estaba la joven con su amigo el gordo,


 


--Y bien... en que estábamos cuando fui interrumpido, jejejeje...


 


--En que la poli efectivamente andaba haciendo una encuesta, o al menos eso es lo que dice la pendeja esta...


 


--Bien... bien... espero que así sea chamaca... por ahora te puedes ir a tu colegio pero recuerda que te estaremos vigilando cosita rica, jejejeje, así que mucho cuidadito con andar contándole falsedades a la poli...


 


--No se preocupe señor Lucas... le juro que...


 


--Yaaaa... yaaa... yaa... déjate de tus explicaciones idiotas y ahora lárgate a tu colegio zorraaaa!!!, y recuerda que tú tienes algo que me pertenece, y que cualquier día de estos iré a tu casa a ocuparlo, jajajaja...


 


Yamile Riveros aprovechando que el viejo Lucas estaba dando su autorización para que ella por fin se marchara, salió caminando rápidamente hacia la parada del autobús.


 


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Y así pasaron los días, en donde la joven colegiala poco a poco comenzaba a dejar atrás la traumática experiencia acontecida aquel día lunes en que en menos de 24 horas se había acostado con dos hombres distintos.


 


Pero la situación era más que incomoda para la potente chamaquita, ya que en el colegio debía soportar los seguidos acosos del cojo Juan y del maestro Tulio, mientras que en su casa se la pasaba casi encerrada para no toparse con el gordo Anselmo o con don Lucas que por lo general siempre estaban parados afuera del tugurio, y quienes apenas la veían aparecer cuando se bajaba del auto bus comenzaban a hablar entre ellos mirándola y riéndose burlonamente de ella, mientras se la devoraban con sus mal vividoras miradas.


 


Por otro lado sus viejos abusadores andaban desesperados por lograr cogérsela nuevamente.


 


Don Severiano quien se veía tentado en cumplir con sus amenazas no se atrevía a contarle a todo el mundo de su caliente incursión con la nena, ya que si lo hacia sus oportunidades de lograr encamarse nuevamente con ella quedarían en casi nulas, y por más que presionaba a Rodrigo para que la llevase a almorzar, cenar o a cualquier otra cosa, este le decía que su novia ahora prefería que pasaran la tarde en su casa, y así lo hacían pero siempre bien vigilados por don Benito, que no se descuidaba en las oportunidades que llegaba el chamaco a visitar a su nieta.


 


Luego y como ya se dijo anteriormente estaban los continuos acosos y elucubraciones por cogérsela que hacían el cojo Juan con el maestro Tulio, que por cada vez que iban a poner en acción algún plan este no les funcionaba por distintos tipos de motivos, era algo muy parecido a cuando Pierre Nodoyuna junto a su perro Patán hacían trampas, para que se hagan una idea.


 


Por su parte el sargento Eustaquio Sinforoso patrullaba sus calles buscando a la colegiala, siendo negativo su procedimiento, pero sabía que tarde o temprano se iba a hacer un tiempito para ir a hacerle una visita a su casa, además que debió aplazar la invitación por haber estado de turno el día en el cual había quedado de ir a almorzar a la casa de Yamile Riveros, así que fue él mismo quien se presento con una rosa en la mano y de uniforme en el hospital donde trabajaba Isabel para ir a presentarles sus disculpas y en donde ambos quedaron para el próximo domingo, tras haber tomado una buena taza de café en la cafetería del centro hospitalario en donde él caballerosamente pago la cuenta, quedando como rey ante la aun antojable madre de la chamaca y sus compañeras de trabajo quienes la observaban de lejos y que la taparon a preguntas de cómo había conocido a tan atento justiciero, y mamadas por el estilo una vez que este se hubo retirado en su furgón policial.


 


No obstante el más relajado de todos estos aprovechadores personajes era el abominable y lujurioso de don Pedro, quien ya habiendo llegado a la ciudad después de casi tres semanas de ausencia ya se aprontaba para llevar a cabo la probadita que le pensaba dar a ambas chamacas juntas tal como lo había planificado con su hermano, otro mecánico tan fiero y caliente como el mismo.


 


Era viernes y el siniestro de don Pedro tenía su día libre, para ese día en la tarde pensaba darle conocimiento a su mujer, así se refería el vejete cuando pensaba en Yamile Riveros, que en esta misma noche debía llevarle a la feria a su amiga la pendeja rubia y con cara de viciosa que él había visto aquel día en que abordo a la escultural chamaca detrás del toro mecánico.


 


Mientras pensaba en todo esto estacionaba su cacharriento automóvil a media cuadra del Pie Grande, ya que debía coordinar también con su hermano a pesar de ya haberlo hablado telefónicamente.


 


Aun no era medio día, y el viejo ni se imaginaba la traumática experiencia que estaba solo a segundos de vivir.


 


Una vez fuera del carro se encamino por la angosta vereda de la calle en dirección al taller, y cuando ya solo estaba a pocos metros de llegar a los gruesos portones de este casi se fue de culo por la fantástica visión con la que se topo su lujuriosa y perversa mirada.


 


Ante él y a solo tres metros de donde estaban ellas se quedo estático, boquiabierto y casi babeando. Vio que estaba María con un bikini color blanco y con zapatillas con taco, al lado de ella había un equipo musical en el cual unos grandes parlantes negros retumbaba una alegre música reggaetón.


 


Su sobrina política meneaba sugestivamente sus caderas al ritmo de aquella perversa música, pero lo que lo dejo casi al punto del ataque cardiaco y de la insania fue ver con sus propios ojos a una tremenda mujer rubia de pelo alisado hacia un lado de su cara y de ojos azules que también acompañaba a María, era una hembra soberbia y tenía una mirada transparente se decía el alterado vejete, de esas misma miradas que a él le gustaba envilecer.


 


Mientras don Pedro se encontraba en tal estado de impúdica abstracción libidinosa, Gabriela solamente movía sus rodillas muy levemente siguiendo el ritmo del alegre tema reggetonero, aun no se daba cuenta de la presencia de tan vulgar sujeto.


 


El viejo no atinaba a nada solo se quedo mirando a aquella imponente mujer rubia, que también vestía un traje de baño de dos piezas y color rojo, y que este era de por si pequeñísimo, mucho más que el de su sobrina, y que se gastaba unas tetas de infarto, la parte inferior de aquel endiablado traje de baño apenas alcanzaba a tapar su tajo se decía el viejo para sus adentros y en forma escandalizad, sus ojos se le iban inyectando en sangre a medida que recorrían y se devoraban las líneas de tan impresionante hembra.


 


Don Pedro secándose las babas de su boca con la manga de su percudida camisa y tras haberse recuperado del primer impacto, se fue acercando para comprobar el mismo que lo que estaban viendo sus ojos no fuese una ilusión óptica mientras no paraba de comerse con la mirada a semejante monumento de mujer. Su verga había reaccionado al instante y el viejo sentía como esta se le iba parando mientras él no paraba ni se cansaba de devorársela, esa hembra era toda una Diosa se decía ahora relamiéndose con la lengua sus resecos labios a medida que avanzaba hacia ella recorriendo cada centímetro de aquel soberbio cuerpazo que se gastaba la muy desgraciada se decía y se volvía a repetir.


 


--Pero que es lo que tenemos aquí...?, fue lo único que atino a decir, claramente dirigiéndose a su sobrina tras escupir hacia un lado de donde estaban las edecanes, pero sin quitar su caliente mirada del cuerpo de la atrayente rubia mirándola de pies a cabeza una y otra vez.


 


Gabriela cuando se sintió observada por don Pedro desconociendo que él era su cuñado, sintió miedo por la atrYamile Riverosda y desvergonzada forma en que este la miraba, ese tipo tenía cara de delincuente o de psicópata, se decía, además que notaba como este no paraba de observarla en forma lasciva y lujuriosa según ella misma lo sentía.


 


La avergonzada hembra se sintió intimidada ante la presencia del tan descarado viejo, aquella extraña forma en que este no paraba de comérsela una y otra vez la estaban poniendo más que nerviosa. Lo vio todo traspirado como venia, el tipejo aquel también era mecánico pudo dilucidar al caer en cuenta que este traía puesto un overol de trabajo pero la parte superior del engrasado mameluco lo traía amarrado a su cintura, y por encima una mugrienta camisa toda gastada y percudida, las manchas de sudor pegadas en esta así lo demostraban, además  que no combinaba para nada con su atuendo de trabajo.


 


A pesar de no ser tan corpulento, la rubia veía que este tenía una prominente panza caída, y los pellejos sueltos de su cara lo hacían ver si como ese hombre estuviera deshidratado, con una barba sin afeitar de unos buenos días más lo asemejaban con un viejo drogadicto, o un ex carcelario, que con un buen hombre de trabajo.


 


La casada creyó ver en su mirada un brillo extraño pero que de alguna parte le era conocido o familiar, ahora este le sonreía mostrándole unas encías casi despobladas de dientes, solo se veía una que otra pieza dental en pésimo estado y de color café bien oscuro, aparte de lo anterior además este viejo tenía en una parte de sus encías una masa ennegrecida como si aquella parte de su boca estuviese en total estado de pudrición.


 


Y justo cuando María, que sabía muy bien de quien se trataba este personaje, y le iba a explicar la situación al vejete que no se cansaba de comerse a la ya exasperada rubia, un automovilista toco la bocina de su carro para que le llevaran uno de los folletos con los precios del Pie Grande así que la chica se tuvo que alejar para ir a intentar captar un futuro cliente para el taller, por lo que la dorada edecán se tuvo que calmar para intentar ser ella la dueña de la situación, después de todo este hombre era otro de los tantos que se le acercaban para hacerle preguntas de repuestos y precios, así que luego de tragar saliva le dijo,


 


--Buenas tardes señor... reciba un folleto con nuestros precios... son muy económicos y contamos con los mejores mecánicos de la ciudad..., le dijo la casada con su blanca y encantadora sonrisa de siempre, confundiendo a su casi cuñado con un cliente. (Ojo que a estas alturas de la historia, Gabriela aun es la mujer legitima de Cesar, aunque separada de hecho)


 


El viejo que tampoco la conocía se quedo sin habla, pero de donde había sacado su hermano a semejante pedazo de hembra para que zorreara en su taller!?, se preguntaba una y otra vez, y ya no respetando ningún signo de civilidad, el viejo le contesto tal cual como él era, en la forma más vulgar y pelada de como él estaba acostumbrado a tratar mujeres de aquel calibre,


 


--Cuanto me cobras por dejar esta chingadera de folletos y mamadas de repuestos para que nos vayamos a acostar ahorita mismo pendeja...?, jejejeje... le decía y reía sin parar de recorrerla de pies a cabeza.


 


Gabriela quedando casi en estado de shock por semejantes peladeces, solo se dio a gesticular con su boquita pensando en aquella propuesta que le hacia  ese horrendo viejo, o sea desde que trabajaba de edecán en el  Pie Grande por solicitud del hombre que le había enseñado a conocer el significado del amor verdadero según ella, habían sido mucho los hombres que la cortejaban con palabras halagadoras, unas mas subidas de tono que otras, pero ninguno le había dicho abiertamente que se fueran a acostar por dinero, ni siquiera don Cipriano fue tan pelado y ordinario cuando recién la conoció, pensaba una  y otra vez.


 


--Señor no me mal entienda... yo solo le estoy ofrec...


 


--Yo no mal entiendo nada zorraaaa...!!!, por lo general ustedes las edecanes siempre se van a acostar a escondidas de todo el mundo con los clientes por un buen dinero, pero si mira nada mas... esos trapitos apenas te tapan la concha...jajajaja!, si casi estas encueradaa...! y ahora te vienes a dártelas de decentita putaaaa??!!!, y diciendole lo ultimo con total propiedad poso una de sus descascaradas manazas en el soberbio culo que se gastaba aquella exquisita Diosa.


 


Gabriela al sentir esa grasienta y caliente mano en una de sus nalgas se separo en el acto diciendole,


 


--Noooo...! que haceeee...? no me toqueeeee...!!, le exclamo la rubia cuando en forma totalmente escandalizada le retiro bruscamente la mano de su cuerpo retrocediendo un par de pasos para ponerse a salvo, y justo en el momento en que el salvaje viejo que ya estaba caliente hasta la locura con el solo hecho de estar ante tan soberbia yegua, este se iba a abalanzar para abofetearla por quisquillosa llego junto a ellos María quien camino hacia ellos rápidamente una vez que había visto y escuchado como su tío Pedro intentaba propasarse con su amiga.


 


--Déjela tranquilaaaa...! como se atreve a tratarla de esa forma... acaso no sabe quién es!?, le pregunto la chamaca al de su tío una vez que se interpuso entre este y Gabriela,


 


El viejo mirando a su sobrina en forma bestial solo le contesto...


 


--Jajajajaja...! es solo una puta...! igual que tu encuincla de mierda...!!, y no te metas en mis asuntos zorraaaa...!, esta hembra necesita que le metan la verga si así cómo anda vestida lo anda pidiendo a gritos, jajajaja!!!


 


--Ella es la pareja de su hermano... su cuñada, como es que no lo sabe...!?, María sabia que el viejo ese era bravo y caliente, y que si no lograba contenerlo lo más seguro era que este sería capaz hasta de violarse a Gabriela igual como lo había pensado su otro tío al principio.


 


El viejo una vez que escucho lo que decía su sobrina se quedo mirando a esa extraña mujer rubia que aun respiraba aceleradamente producto del impacto emocional en que este la había dejado. Así que esta era la hembrita por la cual su hermano se había separado?, se preguntaba a la vez que le daba toda la razón ya que la otra mujer que había tenido por cuñada era bastante fea, además que desde hace rato que estaba pasada en años. Tenía muy buen gusto el muy desgraciado reía pensando para sus adentros sin dejar de mirar a la rubia y a su sobrina, como también se preguntaba como la había hecho el muy hijo de puta para dejarse el tremendo pedazo de mujeron para él solo, y mientras más pensaba en el asunto la situación más lo calentaba, decidiendo que el también quería culearsela, total si la rubia esa había sido capaz de coger con su hermano a espaldas de su marido tal como le habían contado, porque no podría hacerlo ahora también con él, pensaba don Pedro en forma desquiciada, así que desde ya se dio a trazar su plan para ver si podía lograr algo con la nueva vieja de su hermano, sería un trabajo difícil pero no imposible se dijo finalmente, hasta que se dio a contestar,


 


--Jajajajajaja...!! si claro ya me habían llegado los rumores, jejejeje, pero por lo que yo sé mi verdadera cuñada está en su casa tranquila, esta es solo una zorra mas de las que se ha pisado el buen Cipriano, tarde o temprano la abandonara y volverá con su verdadera mujer, o sea con su esposa legal. Dijo esto último siempre mirando a la rubia esperando ver cuales serian sus reacciones.


 


--No le hable así viejo desgraciado...!!, mi tío Cipriano se separó y ahora vive con Gabriela..., María quien ya estaba acostumbrada a tratar con viejos pelados se daba a defender a su amiga ya que por mucha personalidad y carácter que ella tuviera no estaba acostumbrada a que la tratasen tan vulgarmente como lo estaba haciendo su otro tío.


 


--Jajajaja... Gabriela?, así se llama esta peuca!? con solo escuchar su nombre más se me para la verga, jajajaja!!!!, se burlaba el viejo quien al decir lo último en la forma de lo más vulgar se agarro el paquete con una mano moviéndola con firmeza para que ambas mujeres lo vieran, para luego continuar con sus salidas apreciaciones, --Tal vez este pendejo por ahora la tenga como su zorra oficial... pero no será por mucho tiempo sobrina... mi hermano tarde o temprano volverá con tu tía, y esta ramera tendrá que buscar otro lugar en donde ir a hacer sus puteadas, jajajaja...


 


--Le digo que se calle...!!!, le decía María mirando al vejete y a Gabriela quien esta ultima ahora estaba con sus manos en la cara perceptiblemente llorando debido a todas esas palabras que salían de la boca de aquel ordinario sujeto que recién se enteraba que era el hermano de su macho, además por la conmoción de haber sido manoseada por este mismo.


 


--Ya... ya... no tengo tiempo para ustedes par de zorras, donde esta Cipriano?, tenemos un negocio para esta noche y vengo a confirmar con él.


 


Don Pedro había determinado que por ahora con eso ya era suficiente, se había encargado de dejarle bien claro a la rubia que para él y su hermano ella era simplemente "la otra".


 


--Está en su oficina..., le contesto María, --Pásele... pásele, que aquí solo está gastando aire...


 


--Cállate zorra atrYamile Riverosda...!, recuerda que fui yo quien te enseño a ponerte las toallas higiénicas en la concha, jajajaja...!!!, y tráele agua a esa puta que está llorando solo porque uno le dice unas cuantas verdades, jajajaja...!!!


 


El vejete una vez de haber terminado su bombardeo de leperadas simplemente se fue a encerrar a la oficina de su hermano a beber cervezas con él mientras se ponían de acuerdo para la agitada noche que les esperaba.


 


--Tranquila amiga... no le hagas caso y tampoco le tengas miedo, el es mi tío Pedro... siempre es así, pero en el fondo no es tan malo, veras que solo te trato así porque aun no está acostumbrado a verte.


 


--Gracias María... tú has sido una muy buena amiga... siempre estás ahí para ayudarme..., le decía la rubia secándose las lagrimas con un pañuelo desechable, --Además que la culpa es mía, yo ni siquiera debería estar trabajando de edecán en mi estado.


 


--Ahhhh... no seas tonta Gabriela, si ni siquiera tienes el mes y medio, no se te nota nada aun, si eres preciosa!!!, le decía la chica intentando levantarle el ánimo, --Mira vete a la casa... yo me encargo sola este día de repartir los folletos, y ya para el lunes estarás más tranquila.


 


--Crees que deba decirle de lo sucedido a Cipriano...?, le consulto una confundida Gabriela a María,


 


--Mmmmm... creo que no es buena idea, ellos son hermanos y siempre se han llevado muy bien, para que crear un escándalo si en el fondo no te hiso nada?, así que tranquila... veras que desde ahorita que sabe quién eres ya no te molestara mas.


 


--Bueno... creo que tienes razón, e intenta no comentarlo con nadie, entonces me voy a cambiar ropa, tu explícale a tu tío que me retiré por haberme sentido mal...


 


--No te preocupes yo me encargo.


 


Y así fue como la rubia aunque en forma inconsciente ya comenzaba a ocultarle cosas al hombre con el cual no debería existir este tipo de situaciones ¿Habría sido esta omisión de información otras de sus estupideces?.


 


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(Algunas horas más tarde, pero en otro lado de la gran ciudad)


 


Ya habían pasado casi dos semanas desde que la escultural colegiala había sido abusada por un horrendo policía, y ya casi dando por pasado aquella traumática experiencia ahora se daba a arreglarse para salir a dar una vuelta con Rodrigo, ella sabía que en los momentos en que no era abordada o chantajeada por viejos lujuriosos era con su amado novio con quien se sentía la chica mas dichosa de la vida debido a los nobles sentimientos del joven, y que este no tan solo pensaba en sexo sino que también le interesaban los sentimientos de ella, sus gustos y su opinión.


 


Se había puesto para él una minifalda de mezclilla azul muy ajustada a sus amplias caderas y a sus muslos, una blusa blanca con tirantes que le dejaban sus tetas apretaditas para quien las mirase, y con una chaqueta cortita también de mezclilla y del mismo color.


 


Fue en el momento en que tras haberse perfumado solo lo suficiente que se dio a mirarse en distintas posiciones frente al espejo, las sandalias que había escogido eran unas que hace muy poco le había regalado su madre debido a las muy buenas notas que había obtenido en el semestre, estas eran de esas que en la parte superior traen como cordelitos y que estos se ajustan a la pantorrilla hasta un poco más abajo de las rodillas, muy parecidas a las que usaban los romanos en los tiempos de Popea.


 


La nena se veía espectacular y ya a sabiendas que estaba en condiciones, fue a esperar en la salita a que pasara la tarde, aun era temprano y había quedado de juntarse con Rodrigo en la misma plaza en la que a veces se encontraban para hacerse arrumacos.


 


Pero esa sensación de tranquilidad poco le iba a durar ya que en ese preciso instante su teléfono empezaba a sonar, Yamile Riveros se alegro mucho pensando que lo más seguro era que quien llamaba debía ser su novio para adelantar la cita de aquella tarde, no obstante su sentimiento de alegría se fue a las pailas, ya que apenas vio el numero entrante cayó en cuenta de quien se trataba, en la pantalla azul con burbujas moviéndose para todos lados se leía clarito: Llamada entrante de: "¡¡don Pedro!!".


 


La chica tragando saliva y recordando todas las amenazas del vejete supo que no tenía más alternativa que contestar, pensando erróneamente que el viejo solo la llamaba para marcar su territorio, o para molestarla,


 


--A... a... alooooo..., contesto en forma tímida una vez que se dio la fuerzas para ello,


 


El vejete notando las malas ganas con que la chamaca le contestaba desde al otro lado de la línea se dio en el acto a hacerle ver como a él le gustaba que le contestara cuando la llamara,


 


--A ver...! a verr...!! a verrr...!!! que formas son esas de contestarle a tu marido estúpida...!!!


 


--Ehhhh... es que no se con quien hablo... quién es...?


 


--No te hagas la pendeja zorraaaa...! tu muy bien sabes con quien hablas...!! o ya se te olvido quien es tu macho, tu hombre...!!, el que te culiaaaaa!!!!


 


--Ehhhh... don Pedro es Usteddd?, le contesto la jovencita a sabiendas que ya no podía evadir la conversación,


 


--Jejejejej así es zorraaaaa, y quien más podría ser mensa, o acaso ya te has revolcado con algún otro...!?


 


--Es que yo no sabia...


 


--Silencio perraaaa, no tengo tiempo para tus estupideces... has extrañado mi vergaaa!!??


 


--Como está Usted..., la colegiala intentaba esquivar semejante pregunta,


 


--Jajajaja tú y tus webadas de señorita bien portada...!, pon atención pendeja, esta mismita noche te quiero a ti y a la rucia de tu amiga en la feria, estamos ubicados en la cancha que está a tres cuadras del parque en donde te culie la otra vez junto al toro mecánico, jajajaja...!!!


 


La nena cayendo en cuenta que el plazo había llegado y que el viejo quería que esa misma noche ella con Claudia fueran a la feria en donde él trabajaba, intento por algún medio de aplazar la situación,


 


--Ehhhh don Pedro... y no podría ser para otro día, hoy mi mamá no está en casa y yo no pue...


 


--Me importa una verga en donde este tu madre hoy día zorra, tu eres mi mujer...!! mi hembraaaaa...!!! mi esposaaaaaa!!!!!, por lo tanto apenas yo te llame y te dé instrucciones tu solo obedece, o ya se te olvido que mañana mismito puedo ir a tu colegio y hacer que te expulsen por andar puteando, jajajaja!!!


 


--Don Pedro, es que de verdad que ahorita no puedo... justo en este momento iba a s...,


 


--No me importaaaaa...!!! y ya no me sigas dando problemas porque o si no te juro que ahorita mismo voy para allá y a parte de meterte la verga... te pegooooooo!!!!!. Así que me solucionas tus webadas que tengas que hacer y te quiero a las 9 de la noche en la feria y con la puta de tu amiga, solo llega a las boleterías y dices que vienes de parte de Pedro Ventura y te dejarán entrar, y recuerda... si no me llevas a la rubia, mejor ni siquiera te aparezcas, pero atente a las consecuencias... Chao zorraaaaa...!! y dije a las 9...!!!!


 


Yamile Riveros se quedo aterrada mirando su celular que titilaba en sus manos también titilantes, y como este se apagaba al haberse cortado la comunicación, por lo que le dieron ganas de decir: "Ohhh... y ahora quien podrá defenderme...?!", pero desecho al instante esa opción ya que nadie la salvaría.


 


Tras pensársela por algunos minutos y dando incoherentes vueltas en el comedor de su casa, pensaba en cómo decirle a Claudia lo que pretendía el vejete, que pensaría ella de todo eso, ya que estaba claro que este se las iba a coger a las dos juntas, o al menos eso era lo que ella creía, además que el viejo en forma enfática le había aclarado que ella era su esposa, y que también este viejo desgraciado pretendía compartirla con quien sabe quien.  De pronto pensaba que todo eso era una locura y que su amiga no tenia que porque verse arrastrada a esa situación, pero luego imaginándose todo lo que hablarían de ella en su colegio si al demonio de don Pedro se le ocurría ir a enseñar la copia de su infracción por puta, ahí sí que su imagen y honra se verían dañadas para siempre, sin mencionar la segura expulsión del establecimiento, y con su pobre madre retirando sus documentos de este porque a su hija la echaron por puta, era lo que meditaba amargamente, así que comprendiendo que la opción de Claudia era un mal menor, y tragando saliva para ver que palabras iba a ocupar tomo nuevamente su celular para llamar a la atractiva Claudia, su mejor amiga.


 


--Jijijijiji, que milagro que me llamas Eve... justo vengo de tomar una ducha, le hablaba la rubia estudiante a su amiga de la infancia mientras se pintaba las uñas con el celu puesto entre su oreja y su hombro, estaba vestida solo con una toalla bajos sus brazos y otra en su húmedo cabello, ya que venía recién saliendo de darse un baño.


 


--Clau... necesito que hablemos..., la voz de la nena era de nerviosismo,


 


--Pues dime mensa... si para eso somos las amigas..., la voz de la rubia al contrario de la de su amiga del alma era de total despreocupación,


 


--Es que... es que ahorita necesito pedirte un favor...


 


--Pero dime mujer que aun tengo que vestirme... a las 8 me debo ir a juntar con mi novio para ir al cine.


 


Yamile Riveros cayó en pánico al enterarse que su amiga ya tenía planes para esa noche, así que le dijo,


 


--Claudia... puedo ir para tu casa...? necesito decírtelo personalmente,


 


--Eve que te pasa...!? te noto rara la voz... Claudia ya comenzaba a notar algo extraño en la voz de su amiga.


 


--Clau... no te me vayas a ir, solo espérame y te digo...


 


--Bueno, está bien...!, pero apúrate para que alcancemos a hablar un ratito.


 


Una vez que Yamile Riveros quedo en acuerdo con Claudia tomo su bolso, las llaves de la casa y salió para donde su amiga, no sin antes anticiparse a la situación y pedirle permiso a su mamá para ir a quedarse a la casa de la rubia, la señora Isabel sabiendo que Claudia era una excelente influencia para su nena no dudo en dejarla que fuera, siempre y cuando se portara bien y que si salían a dar una vuelta por ahí procuraran no entrarse muy tarde, hasta las 10 a más tardar le había dicho.


 


Cuando Claudia abrió la puerta de su casa, junto con estamparle un fuerte beso en la cara tomo a Yamile Riveros de la mano para llevársela casi corriendo a su habitación para hablar cosas de chicas, esto a la rubita le encantaba.


 


--Y bien cuéntame amiga en que te puedo ayudar, Claudia se había tendido en la cama con mucho cuidado ya que no quería estropear o arrugar el vestido negro tipo minifalda que se había puesto para ir al cine con su novio, ya estaba felinamente maquillada y también había planchado sus rubios cabellos.


 


--Es que... es que..., la nena solo la miraba sentada desde una silla que ubico ella misma cerca de la cama para así no tener que hablar tan fuerte,


 


--Pero dime pues mujer que ya me tienes toda nerviosa...!


 


La colegiala tragando saliva le dijo a su amiga lo que ella necesitaba que ambas hicieran esa noche,


 


--Necesito que me acompañes a juntarme con unos... con unos chi... chicos..., dijo finalmente ya que de principio no se atrYamile Riverosó a decirle la verdad a su amiga,


 


--Jijijiji, y para eso tanto misterio... Mmmmmm... Ah no Eve eso si que no...!, tu novio es muy aburrido, y sus amigos deben ser igual que él así que prefiero a que me lleven al cine, jijiji...


 


Aquí venia la parte espinuda para la colegiala ya que tendría que confesarle a su amiga que la cita para esa noche no era precisamente con Rodrigo,


 


--Es que... es que... no es con Rodrigo con quien nos iríamos a juntar..., le dijo intentando con sus palabras que Claudia no le diera importancia a eso de que no sería con su novio lo de la junta,


 


Claudia quien se había quedado mirando las uñas con desgano de pronto cayó en cuenta de las últimas palabras de su amiga, por lo que a poco a poco fue levantando sus ojos verdes,


 


--Que fue lo que dijiste...!?, le consultó con su semblante de asombro ante lo que le decía la mas quitada de bulla de todas sus amigas. Yamile Riveros estaba temblando de nervios, y ahora qué pensaría Claudia de ella, se preguntaba.


 


--Eso... que te dije..., no es con Rodrigo con quien nos tenemos que juntar...


 


La cara de aburrimiento de la rubia colegiala gradualmente se fue transformando en feliz picardía a la vez que se movía en la cama para sentarse y quedar frente a su amiga,


 


--Jijiji... Noooo...! pero que puta que te estás poniendo amiga... mira eso que vas a salir con otro chico y no con Rodrigo... y quien es ese chico!?, cuéntamelo todo..., jijiji...


 


--Clau no me digas así... no me gusta...


 


--Es solo un decir tonta... no me hagas caso y sigue contándome... lo conozco?!, y como lo haces para que Rodrigo no se dé cuenta...!?, Uyyy qué emoción...!!


 


--Es que no te lo puedo decir ahorita... solo dime si me podrás acompañar...


 


La rubia que no era tonta y que se las sabía todas, se puso de pie e igual que las bandidas y fue a ponerle seguro a su habitación para que no las interrumpieran y junto con encender un cigarrillo le pregunto a su amiga,


 


--Eve... y qué pasaría si yo no te puedo acompañar?, se la quedo mirando seriamente a los ojos, ambas los tenían verdes,


 


--Ay no Claudia... tú tienes que acompañarme...


 


--Te dejaron embarazada!?, le pregunto Claudia a raja tabla, la rubia temblaba de nerviosismo, ya que su amiga estaba con cara de una preocupación nunca antes visto por ella, y en algún momento pensó que lo pregunta que ella misma le hacía a su amiga era el motivo de tanto misterio, además que por lo que ella sabia y por lo que la conocía, Yamile Riveros debería ser virgen, por lo que la aunque preocupada Claudia seguía tiritando también de una extraña emoción,


 


--Noooo...!!! le dijo Yamile Riveros mirándola con cara de exaltación,


 


--Ufffff...! gracias a Dios... mira que ya me habías asustado con tantos rodeos, entonces no es nada grave, deja al chico plantado y yo me voy al cine con mi novio, otro día podríamos salir con su otro amigo,


 


--Clau... por favor no me hagas esto... tienes que acompañarme..., le dijo la chamaca pensando en todas las amenazas del vejete y en las consecuencias de estas.


 


--Aja...!, veo que la cosa no es tan simple... y me llama la atención del porque estas interesada en que yo te acompañe, si perfectamente puedes ir sola,


 


--Es que no quiero ir sola... quiero que tú me acompañes...


 


--Te da miedo quedar mal con ese chavo verdad...?


 


Yamile Riveros pensando en todo lo que estaba ocurriendo se daba cuenta como su amiga estaba convencida que con los hombre que ella estaba pidiéndole que se fueran a juntar estos deberían ser dos jovenes de su misma  edad, y pensaba en cómo decirle que esos supuestos chavos no lo eran tanto y que la verdad eran dos horripilantes viejos casi sexagenarios con los que iban a tener que compartir y hasta acostarse, por lo que solo se dio a mover su cabeza en forma afirmativa ante lo que le preguntaba su amiga,


 


--Bien solo porque eres mi mejor amiga dejare plantado a mi novio con sus entradas y sus estúpidas palomitas de maíz, jijiji, a qué hora y donde es la junta?,


 


--De verdad...? de verdad me acompañaras...!?, la chamaca ya casi había dado por hecho que su amiga iba a preferir salir con su novio.


 


--Claro que si tonta... si somos amigas... como te voy a dejar botada, no podría hacerte eso... --Ahhh y ahorita que me acuerdo, para este fin de mes que viene nos iremos a la playa con mis padres y me dijeron que te invitara aprovechando que vienen dos festivos juntos, te das cuenta!?, 4 días en el litoral, con sol, playa y chicos guapos... la vamos a pasar genial...!!!


 


Yamile Riveros poniendo atención ahora a esto último solo le dijo,


 


--Es que no se si pueda ir contigo Clau... me da penita salir a pasarla tan bien como tú dices dejando a mi mamá y mi abuelito solos,


 


--Ay Eve no sea tan trágica mujer... si ellos ya tuvieron su tiempo, y ahora es el nuestro, así que no seas tan aburrida... además que yo soy tu mejor amiga y tal como ahora me la juego por ti espero lo mismo de ti... anda dime que vamos a ir y la pasaremos genial.


 


La colegiala viendo el entusiasmo de su amiga y además de que estaba dispuesta a acompañarla a juntarse con don Pedro y su hermano, por lo que pensó que ese sí era un sacrificio grande, así que le sonrió hasta que le dio su aprobación,


 


--Está bien Clau, este mismo fin de semana le pediré permiso a mi mamá...


 


--Así se habla amiga ...!! oye y a qué horas es la junta con tus amigos?


 


--A las 9 y es en una feria que se instalo en una cancha que no queda muy lejos de aquí...


 


--Una feria!!!! ay qué ricoooo...!!!! me encantan las ferias!!!!!. Claudia dentro de su entusiasmo igual notaba que a su amiga algo la tenia mal, ya que no dejaba de mirar al suelo y morderse los labios, --Y ahora qué te pasa Eve...? ya te dije que saldríamos con tus amigos y sigues con esa cara de pesar, que te pasa?


 


--Ay Clau... es que tu no me entiendes...


 


--Y entender qué?, que vamos a salir con unos chavos...?, pus si eso lo hago casi todos los fines de semana.


 


La aproblemada chamaca sabía que no podía traicionar a su amiga y llevarla a los leones así como así, pero no encontraba las palabras necesarias para decirle a Claudia que ellas abiertamente se iban a tener que acostar con los viejos que les iba a presentar,


 


--Pus... pus... ya sabes Clau... a lo mejor los vie..., a Yamile Riveros casi se le sale que con los que iban a ir a juntarse eran viejos, así que corrigió al instante, intentando pasar desapercibida, --Digo esos chavos quizás van a querer hacer eso otro que tú ya sabes...


 


La despierta Claudia capto al instante a lo que se refería su amiga, pero quería cerciorarse bien de que era la misma Yamile Riveros la que le estaba diciendo aquello y no una de las otras putas que tenia por compañeras en el cole que si estaban acostumbradas a andar revolcándose con cuanto chamaco se les presentara por delante ofreciéndoles licor u otras mamadas que dan risa.


 


--Pues no se a que te refieres... sé un poquito más clara..., Claudia ahora prendía otro cigarrillo, ya que la adrenalina la tenía a mil por el curso que estaba tomando la conversación,


 


--Ya sabes... eso que quieren todos los chavos que una haga con ellos...


 


--Jajajajaja... a ya!!!! entiendo...!!! tú me dices que a lo mejor van a querer que nosotras nos acostemos con ellos, es eso no?


 


Yamile Riveros temblando de nerviosismo asintió con su cabeza sin mirar a Claudia, estaba muy avergonzada por tener ese tipo de conversación con ella, además que su amiga estaba convencida que era con unos chavos con los que se iban a ir de parranda.


 


--Tranquila amiga, yo sé desenvolverme ante esas situaciones, verás que los vamos a hacer gastar mucho dinero sin la necesidad de tener que hacer algo que no queramos con ellos.


 


"Pero es que tu no conoces como es don Pedro", le dieron ganas de decirle Yamile Riveros a su confiada amiga.


 


--Oye Eve y cómo es eso que le pones los cuernos a tu Rodrigo con este otro chico, me da la impresión que como me decías hace un rato... eso de que quizás tengamos que hacer eso otro con tus amigos. Mmmmm... creo que tu ya lo has hecho con el chavo que te tocara a ti verdad?


 


La nena se quedo mirando a Claudia, y le dieron ganas de decirle que ella nunca le había puesto la ornamenta a su amado, sino que simplemente se la habían violado, una extraña forma de violación se dijo al instante, pero violación al fin y al cabo.


 


--Vamos no te quedas calladaaa...! siguió atacando la rubia, ya lo has hecho con este otro chavo verdad...!?


 


--Ehhhh si, le contesto finalmente Yamile Riveros en total estado pudoroso al estar confiándole algo tan intimo a su amiga... --Pero Clau... por favor no se lo cuentes a nadie, me da pena estar contándote estas cosas,


 


--Ehhh...!? Ufffff...!! tranquila wey... somos o no somos carnales...!? uy que emocionada me tienes!!!, --Y cuéntame... como fue cuando este chico te lo hiso...


 


--No... n... no te entiendo..., le contestó la chamaca que si entendía lo que su salida amiga le preguntaba,


 


--Que acaso lo pasaste divino tonta... y no me salgas con tus cosas raras y cuéntamelo todo, recuerda que cuando yo lo hice por primera vez tú fuiste la primera en enterarse, así que cuenta...! cuentaaaa...!!


 


Yamile Riveros quien recordó las intensas emociones que sintió en su cuerpo cuando el feroz de don Pedro se la violo al interior de un taller, se dio a confirmarlo con su amiga,


 


--Ehhhh... era... bue... noooo ha ciendoloooooo...


 


--Noooo...!!!, le respondió Claudia con sus ojos abiertos como platos,


 


--Que... Que pasa!?


 


--No... no me hagas caso wey... solo sigue contándome...


 


--Es que ya no se que mas contarte..., Yamile Riveros estaba muy azorada y roja como un tomate por la particular conversación que se llevaba a cabo,


 


--No se pus amiga... dime por ultimo de que porte la tenía ese chico...


 


--Porte de qué...? ay Claudia ya no le sigas... que me da vergüenza... y no se a que te refieres...


 


--Al porte de la verga pues mujer... que otra cosa...!, le dijo Claudia en forma eufórica mientras le mandaba una intensa chupada a su cigarrillo,


 


--Ehhh... bueno la tenía un... po...co... gran.... deeee...!


 


--La tenía grandeeeee!!???, vamos de que porte indícame con ambas manos.


 


Yamile Riveros con sus manitas temblorosas y no acostumbrada a andar contando mentiras le mostro las medidas vergales de don Pedro tal como ella se la recordaba.


 


Claudia al notar la tremenda distancia que había entre una  y la otra mano de su amiga del alma le contesto con sus ojos vidriosos,


 


--No mames...! de verdad la tenia de ese porte!?


 


--Clau... no me gusta que ocupes ese vocabulario..., le dijo con su cara ardiendo por el intenso rubor del momento,


 


--Ahh si... si ... discúlpame...! discúlpame...! pero de verdad la tenia de ese tamaño que me indicaste?


 


--De verdad... pero no sé porque te pones así... ya no quiero seguir hablando  de esto, me da pena...


 


--Hay amiga es que no se qué pensar... ya... ya la última pregunta y te juro que no te molesto mas con mis salidas...


 


--Que quieres saber ahora...?, la nena ya no sabía dónde meterse con tanto interrogatorio,


 


--Y... tu... te la co... comiste toda!?, le consulta Claudia quien otra vez estaba sentada en la cama y al frente de Yamile Riveros totalmente excitada y nerviosa con las confesiones de su amiga,


 


La inigualable chamaca sintió las tremendas ganas de pararse y salir corriendo de la casa de su salida amiga, o sea, si se quedo fue por la misma situación en que estaba metida y además que Claudia era su mejor amiga, sumado a que desde chamacas la rubia siempre había sacado la cara por ella en el colegio debido a su carácter tímido, pero ella no estaba acostumbrada a mantener este tipo de conversaciones con nadie,


 


--Que... cosa... me c... co... comí?, no te entiendoooo..., le dijo finalmente y nuevamente con unos de sus deditos de la mano doblado y puesto en su labio inferior,


 


--Acaso te la pudo meter entera pues mujer... vamos dime te la metió todita!?


 


Yamile Riveros mordiéndose su labio inferior y mirando a su amiga con sus ojos verdes también algo ya medios extraños debido a la singular conversación le asintió con su carita.


 


--Amigaaaa...!, exclamo Claudia de pronto, --Si ya eres toda una mujer...!! bravo!!!, le dijo abrazándola  y poniéndole sus juveniles tetas en la cara de la extrañada chamaca, --Vez...! Vez!? que no es tan terrible hacerlo de vez en cuando con algún chico..., le dijo finalmente estampándole un femenino beso en la frente, --Ohhh Eve ya son las 8.30, como se nos paso la hora con tanta platica, le iré a decir a mis padres que vamos a salir y nos vamos por esos chavos, jijiji.


 


Y así una vez que la descocada rubia dio por terminada la confesión en que sometió a su amiga del alma, pidió permiso para salir y recibiendo un dinerito por parte de sus papis para que devuelta tomaran un taxi, ambas colegialas de 18 años emprendieron rumbo a la feria donde la esperaba el siniestro de don Pedro acompañado por el otro fiero mecánico que era don Cipriano, claro que este ultimo ahorita poco andaba un poco mas tranquilizado, por el tremendo pedazo de mujeron que le había robado a un pobre y buen hombre, y que en esos momentos la tenia preñada y esperándolo en casa hasta la hora que a él se le ocurriera llegar.


 


Mientras caminaban en dirección a la feria Claudia no se cansaba de interrogar a Yamile Riveros sobre su relación paralela y secreta que tenia a espaldas de Rodrigo, deseaba saber todo sobre el apuesto muchacho que había conocido su amiga, en tanto Yamile Riveros intentaba de solo hablar lo suficiente,


 


--Ellos... o sea Rodrigo... y este otro chico que te digo... ehhh son algo distintos...,


 


--Noooooo...! o sea es verdad...! estás jugando a dos bandas, jijiji y yo tan calladita que te creía, pero está bien amiga, así es como tiene que ser una con los hombres, --Oye y como se llama el afortunado...


 


--Ehhhmmm se llama Pe...droo...


 


--Pedro...!?, jijiji que emocionante es todo esto que me cuentas... y dime...


 


En otra parte más retirada de donde caminaban las dos soberbias chamacas a juntarse con un par de vejestorios, un angustiado Rodrigo sentado en un escaño de la solitaria plaza aun conservaba ilusiones que su novia de un momento a otro llegaría, o que le llamaría diciendole del porque otra vez lo dejaba plantado, el ya la había llamado muchas veces y su única respuesta fue el celular apagado de Yamile Riveros, el chamaquito estaba con sus ojos llorosos pensando miles de cosas, algunas con una que otra connotación a lo que en verdad estaba sucediendo, pero no con la crudeza de como lo era realmente.


 


Ya eran casi las 9 de la noche y a esa hora la feria ya estaba en su máximo apogeo, ambas beldades ya habían llegado, una con un exquisito mini vestido negro con el cual enseñaba cada una de sus curvas, y la otra con minifalda de mezclilla, polera blanca con tirantes y con una pequeña chaqueta también de mezclilla, tenían la locura en la entrada, ya que eran largas las filas de personas que deseaban pagar el ingreso, y casi la gran mayoría de esas personas eran chamacos imberbes que iban en busca de acción, otros eran salidos vejetes que estaban dispuestos a pagar la entrada con tal de recrear la vista con la gran cantidad de jovencitas que por lo general asistían a este tipo de atracciones, y la tercera parte ya eran serios padres de familia que concurrían con sus hijos y esposas a disfrutar un rato de las entretenciones, como se dijo la feria estaba atiborrada de gentes.


 


Cuando Yamile Riveros con Claudia por fin pudieron llegar al sector de las boleterías, la rubia recién cayó en cuenta que en esta ocasión fue su amiga quien iba adelante y la arrastraba a ella entre medio de toda la muchedumbre agarrada de la mano, parecía muy apurada según lo notaba, además que se suponía que tenían que hacer la fila para entrar, y cuando por fin ya se vio en la misma entrada de acceso vio como su por lo general retraída amiga y que debido al bullicio imperante y la fuerte música cumbianchera casi le tuvo que gritar a un viejo que estaba ridículamente vestido como los hombres del tiempo de charlestón, con bastón con rayitas blancas y todo, y que ella solamente le dijo que venía de parte de "don Pedro".


 


El viejo que estaba notoriamente todo traspirado y embutido en aquel ridículo traje que por contrato debía vestir mientras checaba los ticket de entrada, quedo impresionado al ver y escuchar el mismo como eran dos potables hembritas las que venían de parte del jefe de los mecánicos de la feria. Cuando este mismo le dio instrucciones de que vendrían dos putillas a preguntar por él y que debía dejarlas entrar sin necesidad de pagar la entrada él se había imaginado dos mujeres cuarentonas todas pintarrajeadas, pero esto... esto que tenía antes sus ojos era muy distinto a lo que el erróneamente había imaginado se dijo mientras miraba a la nena de cabello oscuro y de unos preciosos ojos de color verde turquesa,


 


--Ehhhh...! no te escucho nenita que me dices!!??, le contesto el vejete finalmente mirándolas a ambas de pies a cabeza, su intención no era otra que alargar el momento para deleitarse con la presencia de ambas beldades.


 


--Que venimos de parte de  don Pedroooo!!!, volvió a exclamar la chamaca,


 


--La música está muy fuerte no te escucho...!!, acércate y dímelo al oído...!!!


 


Mientras esto sucedía en la misma entrada de la feria, fuertes silbidos venían desde las largas filas de gentes que esperaban por entrar, pero el viejo no se inmutaba ya que quería retener los más posible a aquellas impresionantes jovencitas que habían llegado preguntando por uno de sus colegas,


 


--Que venimos de parte de don Pedro!!!!


 


--Ahhhh...!? No escuchoooo acércate mas nenitaa, jejejej que es lo que me quieres decir!!?


 


La colegiala ya un lado de aquel tremendo vejestorio, se empino posando sus labios al lado de una oreja poblada de pelos canosos y volvió casi a gritarle,


 


--Señor... venimos de parte de don Pedro Venturaaa...!!!


 


El viejo sintió en sus mismas fosas nasales ese inigualable aroma a mujer joven y limpia, que se entre mezclaba con la fragancia a jazmín, orquídeas o frutillas, que emanaba de ese sedoso cabello oscuro que ella tenía por detrás de la oreja.


 


El caliente portero se sentía hechizado con el candor que desprendía en forma natural semejante chamaquita, mientras veía como la otra hembrita que la acompañaba y que también era tan atractiva como la primera, pero de distinto sabor se imaginaba el vejete, esta también lo miraba con cara de juguetona y estirándose su rubio cabello en señal de espera enfundada en un soberbio vestido negro.

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