Pero el vejete no era tonto, a pesar que se lo estaba pasando muy bien gozando a plenitud de un joven y hermoso culazo de 18 años, sabía que la chamaca tenía otra parte de su cuerpo que le prometía placeres aún mayores, por lo que fue gradualmente aminorando sus arremetidas hasta que con mucho cuidado retiro su poderoso artefacto carnal del precioso reducto que por segunda vez en la noche había disfrutado, para luego ponerse de pie y nuevamente tomo violentamente los cabellos de Yamile Riveros y la hiso que se enderezara, la joven quedo de rodillas, con la gruesa verga de don Pedro solo a centímetros de sus hermosos ojos verdes,
--Ahora quiero que me la chupes, putona y ponle empeño, porque o si no tú ya sabes lo que te pasara, Yamile Riveros recién se fijó que el vejete aún mantenía el palo en sus manos, por lo que aun con sus ojitos llenos de lágrimas, procedió a con una mano despejarse el rostro de cabellos enarbolados y con la otra se asió a la verga que ahora le estaban pidiendo que chupara, a pesar del profundo asco que esta asquerosa herramienta de carne le provocaba, al verla toda aceitosa con restos de jugos de sus propios interiores, que extrañamente pulsaba de arriba hacia abajo, de inflamadas venas azules y verdosas hinchadas, y que en su base estaba frondosamente cubierta por una gran cantidad de antihigiénicos pelos gruesos y negros, fue abriendo su angelical boquita, tal como en una ocasión ya lo había hecho con la verga del maestro Tulio y se la zampo de un puro bocado casi hasta la mitad, con el único afán de dejar contento al viejo que por ahora era su dueño según el mismo le había dicho y para que este no siguiera pegándole.
Cuando don Pedro sintió como su verga era apresada por la dulce y fresca boca de Yamile Riveros, si sintió en el mismísimo cielo, pero que rica tenía la boca esa chamaca endemoniada, la colegiala envolvía con su lengua parte del tronco y del glande, haciendo que su dueño casi perdiera los sentidos de la razón, sin pensarlo dos veces don Pedro se agarró firmemente de los cabellos de Yamile Riveros y comenzó el mismo a dirigir la mamada de verga, moviendo aceleradamente la cabeza de la joven tal cual como si se la estuviera follando por la boca.
Yamile Riveros ahogada al máximo por tanta intromisión de verga en su boca y garganta, ya estaba babeando grandes cantidades de saliva que escurrían por las comisuras de sus labios, de vez en cuando se atragantaba, era mucha la cantidad de saliva que caían también desde sus mismas fosas nasales, que por la presión ejercida por aquella satánica verga, la gran cantidad de flujos salivales mezclados con líquidos pre seminales buscaron el camino de las narices de la jovencita para salir expulsados con violencia desde esta por cada atragantamiento que sufría la pobre chiquilla. El vejete ajeno a todo esto solo gozaba follandose la boca de Yamile Riveros, con sus ojos entrecerrados y con su asquerosa boca abierta y desprovista de dientes daba a demostrar el inmenso placer que estaba experimentando.
--Que bien lo mamas perraaaa!!, exclamaba el horrendo mecánico, inconsciente de que al él no se lo estaban mamando, simplemente era el quien se estaba follando la cabeza de Yamile Riveros.
Por su parte la hembra resistía con mansa y dócil entereza a lo que le estaban haciendo, ya estaba clara de lo que le sucedería si se ponía a reclamar o a hacer problemas, ahí era don Pedro el que mandaba asumía ya la pobre y entregada Yamile Riveros.
El viejo de una se la saco de la boca para no eyacular dentro de ella, y producto del acelerado impulso en que la habían estado utilizando oralmente, la joven cayó de espaldas, su hermosa carita estaba embalsamada con líquidos extraños y saliva mesclada con semen, don Pedro en el acto se encargó de desparramárselas aún más por toda su cara, hasta que sus poros absorbieran esta exquisita y a la vez asquerosa esencia masculina, siguió con sus fenomenales tetazas, que también estaban bañadas con estos líquidos, don Pedro se encargó de desparramarlos por todo el cuerpo de Yamile Riveros, quien daba la impresión de estar totalmente aceitada.
La colegiala una vez ya recuperada de tan salvaje tratamiento, se dio cuenta que el vejete, a pesar de su apariencia decrepita, la tomo en brazos sin ningún tipo de complicación, para de una forma no tan violenta como la había tratado anteriormente, arrojarla sobre la cama que desde hace rato la tenía nerviosa, ya que prácticamente sabía lo que iba a pasar en ella.
Yamile Riveros muy enervada y asustada por los acontecimientos que se veían venir, vio al viejo que con su inmensa tranca desafiando a los cielos, ir a hurgar entre sus ropas para luego decirle y darle conocimiento…
--Escuchame pendejaaa!!, le decía mientras en sus manos mantenía la infracción por prostitución, y la identificación escolar de Yamile Riveros, --La verdad es que no quiero volver a pegarte, pero si me obligas a ello no dudes que lo hare, si miras bien te darás cuenta que aquí en mis manos tengo estos dos documentitos tuyos, que tienen todos tus datos personales, los cuales me los dejare de recuerdo, me vas entiendo?, le preguntaba don Pedro mirando con cara de demonio a la asustada Yamile Riveros, quien le asintió con un ligero movimiento de cabeza,--Quiero escucharte estúpida? Di que entiendes!!, le volvió a decir mirando el palo que estaba a un costado de la cama, cosa que Yamile Riveros capto al instante de lo que pasaría si no le contestaba…
--Si don Pedrooo…le entiendo!, contestaba la tierna y desnuda joven que con una mano intentaba tapar sus tetas y con la otra su tierno y tímido tajito.
--Bien, te aclaro que ahora vamos a dedicarnos a follar como animales calientes, y quiero que pongas de tu parte para hacerme sentir bien y satisfecho, porque o si no, aparte de volver a darte la pateadura de tu vida, el lunes a primera hora voy para tu colegio y les cuento a todos tus profesores que su alumna sale a putiar por las noches te queda claro putita, jejeje, sin mencionar que ahora puedo ir hasta tu casa, no me interesa saber con quién vives, pero de seguro que se mostraran muy interesados en saber lo que hace la zorra de su hija, cuando le dan permiso para salir a divertirse, y yo creo y estoy seguro que tu no quieres eso, para ti ricura, verdad!
Yamile Riveros quien ya iba entiendo de que se trataba tanta explicación e imaginando la cara de decepción que pondrían su madre con su abuelito, el saber que a su hija le habían cursado una infracción por ejercer la prostitución en la vía publica, sin mencionar de lo que opinarían sus profesores y compañeros, a ella que siempre fue tan buena hija, responsable en sus deberes escolares, siempre interesada en participar en ayudantías y cosas por el estilo, con todo esto su vida se vería acabada, todos estos pensamientos casi la hacían enloquecer, por lo que solo se dio a contestar,
--Si don Pedro, yo no quiero eso para mí, snifff!!, por favor hare todo lo Ud. quiera!! pero no vaya para mi casa a acusarme, snifff…snifff, ni tampoco a mi colegiooo!!...buaaaaa!! buaaaaaa!! Sniffff!! Snifffff!! lloraba desconsoladamente.
--jajajajajaja!! Eso si esta mejor mi amorrr, desde hoy día pasas a ser mi mujerrrr!!, mi hembraaaa!!, mi putaaaaaa y en todas sus letrasss!!!, te voy a emputecerrrr!!, te voy a violarrr todas las veces que yo quiera, jajajajaja!!
El viejo ni el mismo se la creía de haber tenido tanta buena suerte de haberse encontrado una tierna jovencita, virgen y casadera, de esas que se arreglan rico con ropas que hacen resaltar las formas de sus cuerpazos recién desarrollados, se notaba que la colegiala era limpiecita y pulcra con su presentación personal y ahora la tenía solo para él, sin mencionar las suculentas medidas que se gastaba, esas endemoniadas y diabólicas curvas que casi lo hicieron enloquecer cuando recién la vio en el puente de la feria junto a su encamable amiga que también estaba tan rebuenota como ella, pero esta zorrita estaba mejor pensaba el detestable vejete para sus adentros y ya aprontándose a tomar lo que la joven poseía al medio de sus piernas y que por esas cosas del destino estaba destinada para uso exclusivo solo para él.
Yamile Riveros lo vio venir a acostarse en esa inmunda cama en donde la convertirían en mujer, por cada movimiento que el viejo hacía para acomodarse junto a su cuerpo, la cama rechinaba obscenamente, cosa que la ponían aún más nerviosa…
--Ya putita entregate dame unos besitos jejejeje, le decía el vejete a la vez que la abrazaba y buscaba su fresca boca, Yamile Riveros no sabía que hacer estaba muy lejos de querer entregarse por las buenas a ese desalmado y caliente vejestorio, pero sabía que su destino dependía de ello.
Don Pedro, dejando la sesión de besos para más tarde, tomo la mano en que la joven cubría sus senos y la dejó a un lado, también retiro la otra con la cual Yamile Riveros protegía su vagina, una vez que logro que la asustada colegiala dejara a la vista sus más preciados tesoros, se sintió conforme, el viejo por muy caliente y macho que fuera para sus cosas, temblaba por la emoción de estar acostado con una hembra de tales características, asquerosamente comenzó a lamerle la suave cara, como a su vez a hablarle en sus perfumados oídos,
--Desde hoy pasas a ser mi juguete personal, mi potranquita rica, serás mi hermoso y personal objeto sexual, y voy a jugar contigo hasta que me harte, hasta que te rYamile Riverosentes de tanta verga que te voy a meter, a la vez que con sus asquerosas manos comenzaba a sobarle las tetas y recorrerla por todo el resto de su cuerpo, --Mmmmmm... que bien hueles ricura, mmmmm… siii...cosita ricaaaa te voy a enyeguecer!!... y esmerate en satisfacerme, porque si me llego a aburrir de ti, te ofreceré a todos mis amigos para que jueguen contigo cuando les den ganas, y te hare putiar en las calles para ganarme un buen dinerito a costas tuyas, así que por favor no me jodas con tus mamadas de que eres virgen y pura, pórtate bien y anda abriéndote de patas, vamos ricura hazlo, ábreselas a tu macho pedazo de zorraaaa!!...
Yamile Riveros escuchaba asqueada los repulsivos planes que tenía don Pedro para ella, ese aliento bucal a podrido, aliento a viejo, ya casi la hacían no soportar tanto manoseo a sus respetables formas, de pronto escucho la primera solicitud de don Pedro, ahora que era prácticamente su dueño,
--Ponte de rodillas al final de la cama y chúpamela de nuevo pendejaaa!!, quiero ver ese culo bien levantado, hazme una buena mamada!!, solicito don Pedro mientras él se acomodaba de espaldas para disfrutar la nueva felación que estaba inquiriendo, Yamile Riveros como pudo fue tomando ubicación de cómo le habían ordenado, y una vez con sus dos temblorosas manitas bien sujeta a la peluda base de su erguida y portentosa verga, y pensando en que ella no quería que este horrendo hombre se acercara ni en la más mínimo a su casa o al colegio, se lo metió en la boca para comenzar a chuparlo y a lamerlo con sus ojos cerrados, procurando no pensar en otra cosa que no fuese en hacerlo sentir bien, y además para que don Pedro no se enojara con ella.
Con deleitosa concentración se la mamaba, con su boquita bien apretada, su cabeza subiendo y bajando, y haciendo círculos de vez en cuando, chupando sin parar un solo momento, como una verdadera poseída por el demonio, lamiendo, moviendo la lengua circularmente por el venoso tronco y el glande, concentrada también en soportar el repulsivo asco, y esperando cual sería la próxima orden de su macho.
--Ohhhhh!! Pero que zorra eres para chupar la verga mamitaaa!!--Eso es así…así…Mmmmm…Arghhhhh!!, gruñía el vejete, ante la sabrosa mamada que le estaba prodigando Yamile Riveros, --Cometelo todooo todoooo!! Tragátelo todoooo putaaaaa!!...
Luego de unos 10 minutos de una morbosa y rica felación, Don Pedro se lo saco de una, le parecía que la chamaca había aprendido muy bien cuáles eran sus nuevas obligaciones, el vejete la quedo mirando ensimismado, que rica se veía la pendeja arrodillada en la cama y con las comisuras de sus labios chorreándole restos de líquidos pre seminales, con sus tetas brillosas por la sudoración obtenida por la morbosa tarea en que había estado ocupada.
El viejo determino que ya era hora de poseerla, de hacerla suya, verdaderamente se la quería meter hasta el corazón, hace mucho tiempo que no se sentía tan atraído de esta forma por alguna hembra, y claro Yamile Riveros era una chiquilla hermosa, que jamás este viejo horrendo y degenerado hubiese tenido la oportunidad de poseer, si no fuera por el extraño curso de los acontecimientos.
El caso es que una inmensa e instintiva necesidad por destrozarla a vergazos se apodero de su desequilibrada mente, tal vez fuese por su olor, por su aroma a pulcra inocencia, o por su belleza.
Don Pedro perdido en un mar de degenerados deseos la tomo con fuerzas para dejarla recostada de espaldas en aquel sucio colchón, Yamile Riveros anticipándose a lo que se venía cruzo instintivamente sus piernas en señal de protección de su casi natural y depilada vagina de escasos y finos bellitos negros y sedosos, el vejete al notar la reacción de la asustada colegiala, le dijo,
--Ahora te la voy a meter pendeja así que no me salgas con tus mamadas, te la voy a meter de una, para que así todo sea más rápido para ti y no sufras tanto, jejejeje, aunque yo sé que igual te va a doler, pero si te portas bien veras que te va a gustar tanto que después me andarás buscando para que te de verga, jajajaja!!, serás mi mujer pendeja, te voy a culiar como jamás nadie te lo volverá a hacer y en el momento en que te lo meta no lo olvidaras nunca, jajajaja, decía el detestable hombre a la vez que iba tomando ubicación entre los hermosos muslos abiertos de Yamile Riveros, que el mismo se había en cargado de ir abriendo.
Yamile Riveros comenzó a llorar de miedo, era injusto lo que le estaba sucediendo, se la iban a culiar adentro de un sucio taller mecánico, que ni siquiera sabía adonde estaba ubicado, atrás quedaban sus sueños de casarse virgen y enamorada, que pasaría ahora con Rodrigo, con qué cara le miraría a sus ojos, el que era tan bueno, tan noble, y ella dejándose culiar por un horrible mecánico que hasta podría ser fácilmente su abuelo.
Sintió su cuerpo aplastarse por el de don Pedro, el vejete ya se había montado sobre el potable cuerpo de la colegiala, que estaba casi ahogada debajo de él y con sus bellas piernas abiertas, esperando lo desconocido, el vejete acomodo su armamento en la entrada de la pequeña rajadura intima de Yamile Riveros, paso sus brazos por debajo de la espalda de la joven para afianzársela desde sus suaves hombros, la apretó contra el en señal de poderío de macho, y ya sin esperar nada más empujo con todas sus fuerzas hacia el interior de la vagina de la tierna colegiala, Yamile Riveros experimento ahora si un inmenso dolor casi jamás sentido en su vida, ni siquiera el palo en el culo que le habían dado hace poco le había dolido tanto, al sentir la gruesa cabeza de la verga de don Pedro intentar calar su vagina.
--Ahhhhhhh, nooooo, por…fa…vorrrrrr!!, grito Yamile Riveros,
--Arggghhh, que apretada la tienes chiquilla del demonio, le decía don Pedro justo al lado de su oído, a la vez que le propinaba otro feroz apuntalamiento vergal-vaginal que tampoco tuvo éxito, Yamile Riveros solo lloraba silenciosamente por el dolor en su vagina, y por todo lo que estaba viviendo, las lágrimas brotaban copiosamente desde sus hermosos ojos verdes y rodaban lentamente por su carita, su visión solamente era el techo de esa mugrosa habitación y los canosos pelos de don pedro que casi le tapaban la mirada, --Preparate pendeja porque ahora sí que te la meto, el mecánico con mucha concentración y morboso ímpetu volvió a empujar con fuerzas desmedidas sobre los apretados pliegues vaginales de la joven, y para buena suerte de él y mala suerte para ella, estos cedieron ante la impecable estocada vergal que les habían asestado, permitiéndole el ingreso hasta la mitad de su gruesa verga, a ese endemoniado cuerpo de Diosa, que él había estado deseando ya desde hace unas tres horas por lo menos,
--Aaaaaayyyyyyyyyyy!! Ayyyyyyyyyyyyyy!! Buaaaaaaa!! Buaaaaaaa!! Don Pedroooo!!, por favorrrrrrr!! Ya..no…me… la… me….taaaaaa!! Sniffffffffff! Snifffff!! Sniffffff!!, Yamile Riveros sentía que la rompían por dentro, sus carnes se rasgaban ante la brutal intromisión a su deleitoso cuerpo,
--Callateeee zorraaaa mal paridaaaa! y acepta mi vergaaaaa! Tomaaaaaa!!, bramo don Pedro dándole un tercer y aún más brutal empuje en donde Yamile Riveros termino por comerse vaginalmente toda la verga de don Pedro, había entrado totalmente, solo los pesados testículos llenos de semen caliente y espeso habían quedado fuera del cuerpo de la hermosa joven recién estrenada sexualmente.
Estaba hecho, Yamile Riveros ya no era más virgen, Don Pedro Ventura, un asqueroso y viejo mecánico se había encargado de tomar y usurpar la virginidad de la tierna colegiala, recién convertida en mujer, dejándosela para el por el resto de su miserable existencia.
El vejete permaneció ensartado dentro del cuerpo de Yamile Riveros y en toda su longitud vergal, por espacio de unos dos minutos aproximadamente, el calor interior del cuerpo de aquella joven Diosa y que envolvían a su verga era el mayor placer que jamás en su vida había experimentado, no quería salirse jamás de aquella apretada vagina que en estos momentos en forma forzosa le albergaba a su gruesa tranca, en la habitación solo se escuchaba los sonoros sollozos de la hembra recién desvirgada.
Una vez que el viejo caliente y degenerado de don Pedro determino que ya era tiempo suficiente para que aquel apretado reducto amatorio se acostumbre a sus dimensiones vergales, concluyo que ya había llegado el momento de empezar a moverse, para que esa joven y tremenda colegiala viera y supiera lo que era culear con un verdadero macho caliente,
--Que rica tienes la panocha pendeja, le decía el vejete babeando y con sus ojos cerrados, --No me saldría de tu cuerpo jamás, eres una verdadera potranca hecha para ser follada por un verdadero potro salvaje, pero ahora sabrás lo que es culiar de verdad ricura, jajajaja!!, Te hace sentir lo que jamás nadie te lograra provocar y te juro pendeja que te va a quedar gustando tanto que querrás repetir la operación cuanto antes, Jajajajaja!!, Te voy a culiar y te voy a preñar!! Serás la madre de mis 4 hijos que te voy darrrr!!, le decía riéndose y burlándose a una ensartada y adolorida Yamile Riveros, que aún mantenía su boca abierta en un ahogado grito de dolor, con sus ojos bien abiertos y vidriosos producto del enajenante impacto emocional y de calvario carnal.
Don Pedro comenzó a moverse lentamente en forma culiatoria, metía y sacaba su tranca solamente hasta la mitad, el calorcito y las placenteras sensaciones que le prodigaban la vagina de aquella núbil Diosa a su verga eran indescriptibles, Yamile Riveros por su parte aplastada y dejándose ensartar, ni siquiera podía moverse por intenso dolor que sentía por cada apuntalamiento que le daban con ensañamiento, sentía que prácticamente la estaban empalando por la zorra, el vejete cada vez se movía mas fuerte intentando adentrarse el máximo posible hacia el interior de aquel curvilíneo y juvenil cuerpo, la cama rechinaba rítmicamente antes los fieros bombeos que hacia el mecánico.
Fueron pasando los minutos y don Pedro cada vez se movía más fuerte y rápido, aserruchaba, metía, taladraba profundamente en los interiores de Yamile Riveros, haciendo círculos con la intención de agrandarle la panocha a la entregada jovencita, el hombre sudaba como , las lágrimas en los ojos de Yamile Riveros ya se habían secado, por ahora soportaba estoicamente las bárbaras y crueles arremetidas de verga que le metían a su cuerpo, ella también sudaba, lo comprobaban algunos cabellos pegados en su cara y ciertas gotitas de transpiración que se le acumulaban entre su cara y narices, no se dio cuanta cual fue el momento en que cerro sus ojos para dejar al viejo que tenía montado sobre su curvilíneo cuerpo hiciera con ella lo que quisiera, el dolor fue pasando en forma paulatina, la cosa era que por ahora la culiada que le estaban pegando era de campeonato y ella sintiéndola con sus piernas bien abiertas y con sus ojos cerrados.
Don Pedro sabía que tenía que aprovechar esta instancia, no estaba muy seguro que si después de la primera acabada se le fuera a parar de nuevo, por lo tanto determinaba que tenía que prolongar lo más posible aquella culiada de antología que se estaba pegando con una bella estudiante de 18 años, los gritos de dolor con los bramidos que había pegado Yamile Riveros gradualmente habían ido aminorando, ahora en aquella habitación lo único que se escuchaba era el prolongado rechinar de la cama ante los bruscos movimientos que hacían sobre ella y los suspiros de dolor y placer de ambos amantes ante la desnaturalizada follada que se estaban pegando.
Yamile Riveros totalmente confundida no sabía qué hacer, el dolor en su vagina había ido aminorando, aun sentía dolor, pero era una extraño dolor que la hacía sentir rico, noto que mientras más profunda era la clavada, el dolor parecía que más iba a desaparecer y como es lógico que ella quería que desapareciera, lentamente comenzó a empujar hacia adelante, a los pocos minutos de estas extrañas sensaciones en el cuerpo de la colegiala, Yamile Riveros ya no se movía para que desapareciera el dolor ni nada parecido, ahora ella ya estaba culiando por autentica y genuina calentura, en un momento don Pedro pensó que la chamaca lo había abrazado para sujetarse, pero cuando en un lapso que él se detuvo para estudiar lo que allí abajo estaba ocurriendo, con placentera emoción comprobó que la joven seguía moviendo sus caderas de atrás y hacia adelante, por lo que a modo de agradecimiento comenzó a moverse y a meter verga en una forma casi demencial, ahora sí que se venía lo bueno pensaba el feliz y amachado vejete,
--Ahhhh que rico te meneas putitaaaa!!, Te lo dije!! yo sabía que iba terminar gustándote, jajajajaja!!, le decía preso por la excitación…
Aun así Yamile Riveros se sentía avergonzada, se preguntaba cómo podía estar sintiendo tan rico mientras este asqueroso hombre mancillaba su cuerpo de esa manera, mas no podía dejar de mover su cintura y caderas, su mente le ordenaba que se aferrara más firmemente al viejo cuerpo del que ahora ya se había convertido en su hombre, ella no lo quería admitir pero a estas alturas ya se la estaba pasando muy bien acostada con don Pedro, lentamente de su mente fueron desapareciendo aquellas terribles imágenes de cuando el detestable hombre le había pegado, pero su conciencia aun le recordaban que a pesar de todo lo antes descrito, a ella se la estaban violando, sin contar de las continuas imágenes de ver a su trabajadora madre esperándola con el desayuno servido, o de su abuelito que tanto la aconsejaba y la cuidaba protegiéndola de los mal vividores, o de Rodrigo su trabajador y fiel novio…
Pero su cuerpo le invitaba a olvidarse de todos ellos, las gratificantes clavadas que le daban a su perfecta anatomía iban a terminar por enloquecerla de placer, don Pedro estaba siendo muy bueno con ella, pensaba en las nebulosas de sus subconsciente, hasta que ya queriendo terminar con todos esos sentimientos encontrados su mente decidió claudicar a todos sus pesares, y se entregó en cuerpo y alma a todo lo que aquel libidinoso viejo verde quisiera hacer con ella.
Sus delicadas manitas con uñas muy bien cuidadas, lentamente comenzaron a deslizarse por las anchas espaldas de don Pedro, Yamile Riveros en un momento se sintió emocionada, de estar en tales circunstancias con un hombre mucho más viejo que ella, y que este le estuviera haciendo sentir a vergazo limpio, esos gratificantes y arrebatadores escalofríos de placer a su cuerpo.
Don Pedro quien ya se sabía ganador de aquella caliente contienda de sexo, separo su cuerpo levemente para admirar a la diosa que poseía ensartada con su armatoste, la vio con sus idílicos y perdidos ojos verdes semi cerrados, como también pudo ver que de sus rojos labios caían una pequeña cantidad de saliva, señal de demostración inequívoca que aquella hermosa hembra ya había sucumbido a los deliciosos placeres de la carne, noto que por cada profunda clavada que le enterraba por la panocha, la hembra emitía un audible: --Shhhhhhhh!!... Aaahhh!!
El vejete sin perder el tiempo y aprovechando la ocasión, busco con febril desesperación aquellos preciados labios rojos semi abiertos que le prometían el paraíso, Yamile Riveros lo recibió casi con agrado para luego fundirse ambos en el más apasionado beso con lengua que ambos jamás en sus vidas se habían dado en ocasión alguna.
La pareja se besaba cada vez más lascivamente, la potente colegiala guiada por un nuevo afecto recién nacido y aflorado desde sus revolucionadas progesteronas, fue subiendo sus manitas hasta la nuca de don Pedro, y por segunda vez en la noche se daba a aplicarle nuevamente un delicado masaje con la yema de sus dedos al áspero pellejo reinado con gruesos y desmadejados pelos canosos, en la cabeza del hombre que se la estaba culiando a la fuerza.
Yamile Riveros ahora se comía y devoraba como una posesa las rosadas encías desprovistas de dientes de don Pedro, sus delicados dedos se perdían entre los hirsutos pelos canosos del mecánico, jugaba asquerosamente con su lengua y la de él, revolviendo la gran cantidad de babas de ambos que se acumulaban dentro de su fresca boquita y que ella se encargaba de ir tragándoselas todas, era una autentica deidad de placer en lo que se había convertida la tierna chiquilla, el viejo aún no se la quería creer, por lo que le devolvía a modo de agradecimiento unas sólidas y profundas arremetidas vergales, para hacerle ver que desde ese día él era su único macho.
Don Pedro apenas se pudo separar de los desesperados labios de Yamile Riveros, y sabiéndose y el haber comprobado que él era ya el ganador le dijo,
--Te dije que te iba a encantar mi verga pendejaaa!! Vamos dime que te encanta mi vergaaaa!!, exclamaba don Pedro sin dejar de arremeter con violencia…
Yamile Riveros no le contestaba nada, la inmensa y desquiciante calentura que se había apoderado de su persona, no se lo permitían. Sus quejidos y suspiros de placer, comenzaron a subir de volumen e intensidad, convirtiéndose en gritos y en alaridos de auténtico placer carnal y sexual, don Pedro mantenía su frenético ritmo de mete y saca, y conforme aumentaban los gritos de la colegiala, mas aceleraba y ganaba fuerzas en sus movimientos, hasta que sus oídos escucharon lo que el ya anhelaba oír, los gritos y palabras que exclamo Yamile Riveros fueron claros y concisos,
--Ahhhh…siiiiii…ricoooooo…papiiiiii!!…
--Te gusta cómo te la meto pendejaaaaa!!, le consultaba el caliente vejete,
--Siiiii, don Pedroooo, métamela todo lo que quieraaaa, mas adentroooo, mas adentroooo!!, exigía la chamaca a la vez que meneaba con fuerzas sus caderas para hacer más profunda la clavada,
--Eres la mejor zorra que me he culiado pedazo de puta! Vamos dilo! Di que eres mi putaaa!!, exigía el viejo quien seguía serruchando y bañado por el sudor y la calentura del momento,
--Siiii papiiii!! Yo soy su putaaa!! Soy su putitaaaaa!! soy su mujerrrrrr!!, Yamile Riveros no era consciente de todas las peladeces, que le estaba diciendo al viejo que había sabido llevarla a tal estado de calentura.
Don Pedro veía claramente la descompostura que estaba sufriendo la hermosa jovencita, que en estos momentos movía sus caderas rítmicamente a las clavadas que el calientemente le concedía, gratamente comprobaba, que el cuerpo de Yamile Riveros estaba siendo preso de unos fuertes y brutales espasmos de placer, veía como la nena se retorcía e intentaba acoplarse aún más férreamente a su propio cuerpo, además que creía sentir como los músculos vaginales de la tierna chamaca se contraían abrazándole y comprimiéndole la verga, y como totalmente salida de sus cavales le pedía,
--Sigaaaa!!, sigaaaaaa!! métamela enteraaaaa!!... estoy a punto de ... métamela más fuerteee!! Todaaa…Todaaaa!!
El feliz y fiero mecánico comenzó a empujar hacia el interior de la joven sin cejar en su empeño, hasta que ambos pubis, uno suave y casi depilado, en contrate de otro que era bien peludo, se quedaron pegados haciendo desquiciantes círculos copulatorios, sin despegarse ni siquiera un milímetro, por lo que ambos cuerpos ya estaban casi al borde de un fenomenal orgasmo, hasta que para el gozo de don Pedro, pudo notar que en la inminente explosión que se venía en el cuerpo de su compañera de coito, su vagina derramaba unos abundantes y calientes chorros de líquidos vaginales, no sabía si estos bien eran de orina o de otro tipos de líquidos, pero de lo que si estaba seguro era que estos le estaban bañando en forma exquisita a su ya casi adolorida vergota.
-- Asii!!, así!!... don Pedroooo!! Deme más fuerteee... deme más fuerteeee!!... continuaba vociferando Yamile Riveros con su espalda totalmente enarcada y con su vagina totalmente levantada, en el afán de que don Pedro no le sacara su verga de su cosita.
El viejo sentía que su verga estaba enterrada hasta lo más profundo de las tiernas entrañas de aquella dulce y caliente potranca que se encontraba perdida en la total calentura. Hasta que el cuerpo de Yamile Riveros no fue capaz de resistir tanto gozo, una formidable y placentera corriente eléctrica que le nacía desde lo más profundo de su zorrita, se expandía a raudales hacia todas las extremidades de su cuerpo y que le hicieron explotar en el más formidable y grandioso orgasmo sentido en su vida, que ni siquiera el cojo Juan le había hecho experimentar, cuando la hiso debutar por el culo.
--Siiiiiiiiiiiiiii!!!, grito Yamile Riveros como una verdadera posesa, su grito placentero fue emitido desde lo más profundo de su ser y de su alma, el cual recorrió y retumbo por todos los rincones del vacío taller de don Cipriano, y que pudo haberse escuchado fácilmente en toda la cuadra de donde se encontraba el Pie Grande, debido al silencio de aquellas altas horas de la noche.
De la misma forma don Pedro determino que este era el momento exacto para verter su apremiante y urgido simiente al interior del cuerpo de tan estupenda y curvilínea estudiante. En el momento en que Yamile Riveros emitía su placentero grito de éxtasis el viejo la callo con un asqueroso beso en la boca el cual daba la impresión que se la estaba comiendo, para luego separase y notificarle,
--Eres una Diosa pedazo de zorraaaaa! Ya no aguan…tooo…masssss!, me voy…a…co…rrerrr… adentro de…tu…cuer…pooooo!! Ohhhhh que…ri…cooooo, la…vas….a …re…ci..birrrrr, pu…taaaaa!! to…maaaaaaa!!, gruño con desesperación, y fijando su mirada, en el hermoso rostro descongestionado de Yamile Riveros, derramo en el interior de su estómago 6 a 8 potentes chorros de hirviente y reproductivo semen, el cual salía escupido en abundancia y con fuerzas desde su verga, quemando las entrañas de la excitada Yamile Riveros quien sentía la potencia y virilidad de su macho, pensaba que aquello era lo más hermosa y gratificante experiencia jamás vivida en su existencia.
Estuvieron pegados en esa posición un espacio de tiempo indeterminado, Yamile Riveros con sus bellos muslos bien abiertos y con don Pedro aun incrustado con su verga al interior de su cuerpo, había sido la follada de sus vidas para ambos, y que el viejo estaba totalmente dispuesto a repetir en cuanto sus fuerzas se lo permitieran. Lentamente el mecánico se fue saliendo y desclavando del portentoso cuerpo de Yamile Riveros, ambos quedaron tendidos en la cama exhaustos, para que sus transpirados cuerpos pudiesen asimilar el placer recibido, y para a su vez se regulasen sus ritmos cardíacos y sus agitadas respiraciones se normalizaran.
--Eres una verdadera puta en la cama a la hora de culiar ricura, el sueño de cualquier macho caliente como yo, jajajaja!!, le decía el vejete a la misma vez que la abrazaba y la hacía apegarse a su obesidad. --Ha sido una de las mejores folladas que me he pegado en mi vida, por hoy creo que será suficiente pendeja, descansemos un ratito y luego te iré a dejar a tu casa, mira que quiero saber dónde vive mi mujer, jajajaja!!
--A Yamile Riveros, a quien ya se le había pasado a medias la calentura, y exigiéndose a ella misma entrar en razón, le contesto,
--Don Pedro, no es necesario que me vaya a dejar creo que me puedo ir sola, tomare un taxi, la jovencita no quería que aquel viejo con el cual se había estado revolcando supiera donde ella vivía.
--Nooo!!, le contesto el vejete, --Desde hoy día eres mi mujer, y yo soy tu marido, y no permitiré que mi hembra ande por las calles sola en la noche, o quieres que aparezca por ahí algún viejo degenerado y te culie, jajajaja!!, se reía ya que él estaba claro que era exactamente lo que le había ocurrido a la encamable chamaca que el ya veía como de su propiedad.
Una vez que descansaron desnudos y abrazados por un tiempo indeterminado, en el cual Yamile Riveros fue retornando a su triste realidad y en donde asimilaba que había sido violada, el viejo determino que ya habían descansado lo suficiente, le ordeno a Yamile Riveros que se vistiera mientras él se ponía su overol de trabajo, había pensado en llevarse a su casa a la colegiala para poder seguir follándosela al día siguiente, pero sabía que eso le podía traer problemas, ya que la familia de la joven se podía preocupar y comenzarían a buscarla, se conformaba que al tener en su poder la falsa prueba que certificaban de que Yamile Riveros era una vulgar puta, ya que esto le garantizaban unos futuros y placenteros encuentros con la colegiala todas las veces que él quisiera, además que idearía la forma para poder dejársela y llevársela a vivir con él, hasta que se hartara.
--Don Pedro…no tengo mis botas, le dijo la chamaca al recordar que sus botas habían quedado tiradas en la feria,
--No importa mira ponte estas, le dijo el vejete a la vez que de a un lado de la cama sacaba unas rosadas chalas de mujer,
--Pero y de quién son?, preguntaba Yamile Riveros, un poco preocupada por tener que calzarse algo que era de otra persona,
--No te preocupes, son de la María, es una sobrina que de vez en cuando se encierra con mi hermano para hacer sus cochinadas, pero es tan limpiecita como tú, e igual de zorra y puta para sus cosas, jajajajaja!!
Y así una vez vestidos hacían abandono del taller, Yamile Riveros a quien la ferviente calentura que horas antes le habían envuelto y cautivado ya la habían abandonado por completo, ahora los sentimientos de culpa le atacaban sin misericordia, se preguntaba cómo pudo haberse entregado en la forma en que lo había hecho a ese odioso y detestable hombre que la había forzado sexualmente y que daba el aspecto de que llevaba unos buenos días sin bañarse, y ella haberlo disfrutado.
Nuevamente sus lágrimas volvían a brotar angustiantemente desde sus ojos, sentía ganas de matarlo, pero con el solo recordar lo bruto que él había sido con ella al momento de metérsela, instintivamente le nacían unas tremendas ganas de volver a quitarse la ropa, tirarse de espaldas en la cama y abrirle las piernas, para que el tomara lo que ella ya pensaba que solo le correspondía a él, para luego volver a recriminarse y preguntarse que por que ahora sentía eso tan raro hacia don Pedro, un asqueroso viejo que solo hace algunas horas le había pegado y violado al mismo tiempo, le había robado lo más preciado que ella poseía y que había sido su virginidad, nuevamente pensaba en su familia, en su vida escolar, en Rodrigo, y lo que más le dolía y se reprochaba era saber que don Pedro la había hecho gozar una verdadera perra.
Los sentimientos que asaltaban a la muchachita eran totalmente contradictorios.
Antes de salir de aquella nauseabunda y sucia habitación, pudo ver la gran mancha de sangre que había quedado en el inmundo colchón, señal irrefutable de su desvirgamiento a manos de don Pedro, el vejete al ver como la joven miraba la escena con sus ojos bañados en lágrimas por lo allí ocurrido, le dijo proféticamente,
--No te preocupes putita, dejémoslo así no más, total, quizás a que pedazo de yegua mal parida se irán a culiar nuevamente en esa cama y encima de nuestros jugos cuando ya estén secos, jajajaja, reía a la vez que la sacaba a empujones de aquel caliente taller mecánico, en donde se quedaba para siempre su virginidad mancillada. (Faltaba poco para que amaneciera)
(4 horas antes aproximadamente en la casa de Claudia)
Una vez que ya estaban en la sala de estar de la casa de la rubia estudiante, el maestro Tulio, no se creía que estaba a punto de acostarse con Claudia, sabía que los padres de ella no llegarían hasta el mediodía del domingo, por lo tanto tenía todo el tiempo del mundo para follársela como el quería ya desde hace mucho tiempo.
Mientras él suertudo y feliz profesor se encontraba perdido en un mar de perversos y lascivos deseos, la rubia servía otras dos copas de tequila para hacer la prYamile Riverosa de lo que sería el encuentro sexual con su profesor, a cambio de los certificados de notas semestrales de su último año de colegio.
Claudia quien en este momento ya ni se acordaba de la suerte de su amiga, producto del alcohol en su mente, se mantenía nerviosa, mitad por la fealdad del viejo con el cual estaba a punto de acostarse, y mitad por saberse también muy caliente de estar a punto de cometer tal abominación.
Los vasos servidos quedaron en la mesita que se encontraba justo al lado del sofá en donde estaba sentado el caliente maestro, este no despegaba sus ojos de sapo de las pronunciadas curvas que ya estaba a punto de poseer, hasta que ya no aguantando más y queriendo un poco más de acción, se atrYamile Riverosó a solicitar…
--Caliéntame rubita, hacete alguna cosita rica para que mi verga este como fierro al momento que te la meta…
Claudia quien también ya estaba deseando que de una buena vez por todas, que aquel anti estético y repugnante viejo verde se la metiera, poso sus infernales curvas enfundadas en el ajustado vestido negro tipo mini falda que llevaba puesto, para inclinarse y posar sus apetitosos labios muy cerca del rostro del vejete para preguntarle,
--Quiere que lo caliente?,
--Siiii mamasota caliéntame todo lo que quieras, le pedía ya casi rogándole…
--Y mis certificados?
El viejo Tulio, ya todo traspirado y tiritando por la emoción le dijo,
--El primero estará listo para esta misma semana, y el otro…, el vejete lo pensó por un momento, --Tu misma me dijiste que eso lo conversaríamos en la cama, le contestaba como buen estratega a pesar de lo caliente que lo tenía la putita de Claudia.
La rubia le regalo una de sus más calentonas sonrisas, para luego depositarle un leve beso en los gruesos y asqueroso labios de aquel lujurioso hombre obeso y sexagenario,
--Espéreme aquí, me iré a poner más cómoda, le dijo la potente Claudia a su maestro.
No fueron más de tres minutos en que la bella estudiante se demoró en ir a su cuarto y volver, pero el viejo casi se volvió loco cuando la vio aparecer desde su cuarto totalmente desnuda, sus ojos de réptil perecieron crecer tres veces más de cómo eran en su tamaño normal, Claudia camino lentamente hacia donde estaba el suertudo profesor que ni se daba cuenta como se le caían las babas ante el morbos espectáculo que le estaba brindando una de sus más bellas alumnas.
Cuando la rubia colegiala ya se encontraba solo a metros del hombre que sería su primer macho como corresponde. Se dice esto ya que todos sabemos lo muy puta que era Claudia para sus cosas, pero debido a su ambiente escolar y a sus jóvenes y ocasionales amantes inexpertos y primerizos en cuestiones sexuales, sus folladas anteriores siempre habían sido con ropa, o a medio vestir, folladas a la rápida, mamadas en alguna plaza o en algún auto, pero ahora era distinto, se iba a acostar totalmente desnuda con un hombre por primera vez en cumplimiento del acuerdo adquirido y también por venganza del estúpido de su novio que había preferido largarse con sus amigos a haberse quedado con ella que tanto había esperado esta oportunidad en que iba a estar sola en su casa. El muy come mierda solo tenía que haber traído un amigo para que su amiga del alma también lo hubiese pasado bien, pero sus planes no habían dado fruto, y el que se iba a regodear con su cuerpo a su total antojo era su detestable profesor, que desde hacía ya dos años que vivía acosándola, y a ella le había encantado haberlo calentado en todo este tiempo.
El degenerado viejo quien miraba el escultural cuerpo desnudo de Claudia que se encontraba solo a un metro de él, se permitió a estudiarla, parte por parte, curva por curva, de una forma descarada y quizá un tanto arrogante por su parte, ya que a estas alturas sabía muy bien que faltaba muy poco para cumplir con uno de sus mejores sueños.
Recorría e inspeccionaba con calentona observancia la hermosa anatomía de la rubia: Uno setenta de altura quizás, unas tetas perfectas y totalmente proporcionadas a su físico, la tersa y suave piel de su vientre totalmente al desnudo, con un pequeño y coqueto piercing de cadenita en su femenino ombliguito, unos muslos y piernas maravillosas y finalmente con su alisado cabello rubio peinado hacia un lado su viciosa cara de putita, que más parecía la de una joven actriz pornográfica, que la de una real estudiante de secundaria como lo era ella, aun así la chamaca se veía hermosa.
Claudia grácilmente poso su dorado cuerpazo en un sillon que estaba a solo un metro del maestro Tulio, que no perdía ni un detalle de las desquiciantes curvas que la rubia le estaba ofreciendo,
--Y así profe?, …le caliento un poquito más?, le preguntaba con una voz de putita profesional…
--Siii mamitaaaaa!! Estoy que largo mis lecherazos en los mismos pantalanes…
--Ay que sed maestro, me podría acercar mi tequila porfi!…
--No faltaba más mi reina, le contestaba el viejo caliente, sumido por una calentura que aceleradamente iba en aumento, a la vez que se paró como espiral tensado, y con su grasienta y temblorosa mano le acercaba la copa a la empelotada Claudia, quien se sentía como una diosa, que podía hacer lo que ella quisiera con aquel caliente profesor.
Claudia a sabiendas que ya no había nada más que esperar, se compadeció del pobre hombre, y dejando de lado cualquier tipo de pudor o sentimiento de rechazo corporal debido a su fealdad, se paró del sillón para quedar de pie junto a él, paso sus desnudos brazos por ambos hombros de su maestro, sintió que la prominente panza del hombre no le permitía adosarse como ella hubiese querido, pero el vejete al ver el pedazo de mujeron desnudo que tenía ya en sus manos la tomo y se la afianzo con brutal y ansiosa desesperación,
--Ay profe no sea tan apurón!, jijiji, le decía y reía la rubia chiquilla quien aún mantenía su trago en una de sus manitas, al notar el ímpetu en que el vejete le manoseaba casi por completo su desnudo cuerpo, Yamile Riverosdenciando asi las tremendas ganas que tenía el maestro Tulio por metérsela…
El vejete buscaba con ahínco los sabrosos labios de la desnuda Claudia, quien no lo dudo mucho para dejar besarse por el aun vestido hombre, lentamente y a medida que el asqueroso beso continuaba el viejo se fue tranquilizando, la rubia por momentos sentía asco, pero al ir sintiendo la dureza que se le clavaba en su desnudo y perfecto vientre que no tenía ni siquiera un milímetro de grasa , poco a poco lo fue soportando, al minuto la encamable colegiala ya estaba entregada y caliente, ella conocía muy bien los placeres del acto de apareamiento, por lo que muy sutilmente se fue separando del que iba a ser su amante por aquella noche, para pasarle la otra copa aun servida y tomarlo de su gorda y aceitosa mano e invitarlo a que fuera a su habitación, en donde se libraría la lujuriosa contienda sexual.
La rubia lo guiaba, ambos próximos amantes cruzaron de la mano la sala de estar para llegar al dormitorio de la joven, cada uno llevaba su trago, y una vez que ya estuvieron al lado de la cama, y mirándose penetrantemente a los ojos se mandaron de una el contenido de los vasos, dejándolos en el velador a un costado de la cama, cuando la rubia quiso apagar la luz de la lámpara, el vejete se interpuso,
--No lo pienses putita, aun pienso que tu precio es un poco alto, así que lo vamos a hacer con la luz encendida, no quiero perderme ni un detalle de tu cuerpo al momento de metértelo y cuando ya estemos culiando, además que no sería justo, me has estado calentando toda lo noche, y este momento no lo voy a desperdiciar, jejejeje…
La Claudia no dándole importancia a la solicitud de su profesor solo le dijo,
--Ay profe usted que es, jijiji…
La estudiante se subió gateando a la cama, el caliente profesor se empezó a desnudar casi con desesperación, al minuto ya se encontraba en las mismas condiciones que Claudia, quien al verlo en su total y asquerosa desnudes, casi estuvo a punto de arrepentirse, pero se dijo para sí misma, “todo por mis certificados, jijiji”.
El viejo no lo dudo para el también subirse a la cama, esperaba expectante a que fuese la rubia quien tomara la iniciativa, ella por su parte se hinco sobre el lecho, para ver cuál sería su primera misión para ganarse los tan preciados certificados de notas, fue en eso que se fijó en la parada tranca que se gastaba el maestro Tulio, la vez en que se la había chupado en su oficina había sido casi en las penumbras y rápido, ya que cualquier persona podía entrar y sorprenderlos, pero ahora la veía en toda su magnificencia, esta era de medidas que se podrían decir normales, pero para Claudia siempre acostumbrada a mamar y servirse simples verguitas de sus novios, la vio como si fuese la verga de un , totalmente poblada por gruesos pendejos negros, terriblemente gorda y pulsando excitadamente rápido, todo esto fue mucho para la caliente estudiante quien instintivamente se lanzó con una lujuriosa expresión en su bello rostro, para comenzar a lamer verga en forma reiteradamente desesperada, hasta que de un solo golpe se lo engulló hasta lo más profundo de sus garganta, manteniéndose en esa posición durante unos deliciosos segundos, en los que el feliz del maestro Tulio aprovecho para empujar y adentrarse aún más en aquella gloriosa garganta que lo estaban llevando al verdadero paraíso.
La veía puesta en 4 patas, moviendo aceleradamente su rubia cabellera de atrás hacia adelante, como una real enajenada mental, mamándole la verga, ordeñándolo con sus labios, como una verdadera corderita recién nacida, notaba en la punta de su tranca que ya casi faltaba muy poco para adentrarse en la faringe de la caliente chamaca, pero la sabrosa y profunda mamada que le estaban dando a su verga continuaba, con movimiento de lengua a veces suaves y en otras ocasiones violentos e intensos, el vejete pensaba que se le iba la vida en aquella magistral chupada de verga que le estaba dando su alumna.
--Ohhhhhh rubita como me comes la vergaaaa!! Exclamaba el vejete, a la vez que dejaba que fuese Claudia quien hiciera el trabajo mamador como ella lo estimara conveniente,
--Mmmm…srrrppppphhh…srpssssss, era lo único que podía emitir la estudiante quien solo se aplicaba a chuparle el pico a su profesor,
Claudia había perdido los sentidos con esa gorda verga que mantenía alojada en su boca y que no podía dejar de succionarla aunque ella quisiese, pero también sentía la imperiosa necesidad, a que su degenerado profesor se la metiera. El grosor de aquella gloriosa tranca de carne la tenían en tal estado de calentura que ahora sí que no estaba dispuesta a dejar pasar la oportunidad a que se la metieran, decidió que su profesor se la tenía que culiar sí o sí.
Lentamente se la fue sacando de la boca, a la vez que sorbía todos los restos de líquidos pre seminales que bañaban el tronco del ahora alargado miembro viril, dejándolo totalmente limpio, pero bien reluciente debido a la humedad de sus labios, ella misma hiso que el hombre se tendiera de espaldas en su camita, para luego en forma inmediata se levantó y fue pasando una pierna por sobre la panza del maestro Tulio para quedar a horcajadas sobre el pero sin metérsela todavía, lanzándose a devorar su repulsiva boca como una verdadera posesa, mordiéndole suavemente los gruesos labios, jugando con su lengua y con la de el. Era una auténtica diosa y un prodigio erótico por la lascivia, lujuria y morbosidad en que ella se encargaba de llevar la situación.
El maestro Tulio aprovechaba su posición para acariciarle las tetas, para lamérselas con desesperación, para chuparlas y mamarlas como si él fuera un bebito sediento de leche, la chamaca estaba divina pensaba, en sus grasientas manos sentía las suavidades de su piel con olor a crema corporal, olía a sexo, olía a hembra, su verga ya latía desesperadamente por adentrarse al interior de aquel cuerpazo. A cada latido de su verga, se producía un leve contacto con su panochita, produciéndole una placentera y arrebatadora sensación, ahora sí que le tenía ganas a la endiablada chamaca.
Claudia le tomo por las muñecas, mirándolo con una cara de puta pervertida y aun encaramada sobre su panza peluda, el vejete que sus ojeras ya estaban que se reventaban por lo hinchadas que las tenía producto de la inmensa calentura que ya casi lo consumían, solo se dejaba hacer por aquella erótica vampiresa.
--Vamos putita…ya dejate de mamadas y dejame meter….
--Shhhhh!!, lo hiso callar la estudiante, dándole a entender que ella sabía lo que hacía, al tiempo que tomaba su trofeo de carne y se lo ubicaba posándoselo en la entrada de su rubia vagina, a la vez que cerraba sus ojos en señal de concentración para dejarse caer casi con brutalidad, penetrándose ella misma y dando un sonoro gemido de placer.
Claudia se la había embocado y metido todo sin la ayuda de nadie, para luego comenzar con unos suaves movimientos de sube y baja, sintiendo y deleitándose con las increíbles y ricas sensaciones que le provocaban el estar ensartándose en la tranca del maestro Tulio, quien yacía recostado y casi incrédulo de la increíble follada que le estaba empezando a dar Claudia, la hembra por su parte y por por la expresión de su cara se notaba que también se lo estaba disfrutando de lo lindo.
La rubia continuaba con los mismos suaves y cadenciosos movimientos de cintura y caderas, exprimiéndosela hasta mas no poder, al tiempo que notaba como una verdadera puta profesional, que al vejete cada vez se le ponía más dura la verga, por la que gradualmente fue acelerando sus movimientos, por cada segundo que pasaba ambos amantes sentían que más placentera y gratificante era la culiada de concurso que se estaban pegando, el viejo también empujaba su apéndice hacia arriba para empalar aún más ala caliente mujer que se lo estaba follando, a la vez que se decía para el mismo, que esta Claudia sí que sabía darle placer a un macho.
--Le gusta lo que le hago maestrito? Le preguntaba la joven hembra a su profesor, con sus hermosos ojos semi cerrados , producto dela acalorado excitación en que se encontraba,
--Siiiii zorrita realmente te mueves ri….coooooo! por Dios ni…ñaaaa!!… como me sorbes la ver…gaaaa!!
--Me he ganadooo mis cer…ti…fi…ca…dossss?...
--Claro que si linduraaaaa…, pero el otro lo conversaremos después, por ahora sigue cabalgandomeeee….. pu…taaaaaa!!
La rubia estudiante, ya más preocupada de su propio placer que de los certificados escolares inicio una acelerada cabalgada, con la única intención de dejar secas las bolas de profesor Tulio, se meneaba con auténtica calentura, en ciertos momentos ondulaba su cintura, arremetía y exprimía la verga que tan deliciosamente ella sola se estaba culiando para luego volver a una rítmica cabalgada que ya la estaban llevando hasta el mismísimo cielo.
El degenerado profesor determino que ya había dejado mucho tiempo que la acalorada puta que sabrosamente lo estaba cabalgando, se sintiera dueña de la situación, ahora le enseñaría lo que era culiar de verdad con un verdadero macho caliente, se enderezo como pudo y trabajosamente, ya que la Claudia quien se encontraba perdida en el mar de la lujuria no podía dejar de menearse violentamente, esto al profesor le encantaba, una vez enderezado y cuando la rubia quiso lanzarse a besarlo el profesor la tomo de sus suaves y pronunciadas nalgas y se la desclavo de una, arrojándola de espaldas a la cama, Claudia no sabía muy bien lo que estaba pasando, cuando lo vio venir asquerosamente a montarse sobre su curvilíneo cuerpo, se lo imagino como uno de aquellos asquerosos monstruos que aparecen en las películas de hentai, pensaba que solo le faltaban los tentáculos, pero esto la calentaban aún más.
El vejete se hecho con su aplastante y pesada humanidad sobre las curvas de la joven estudiante para comenzar a besarla en sonoros movimientos de lenguas y saliva, poco a poco comenzó a bajar por su anatomía, pasando por sus tetas que aprovecho de lamérselas por unos segundos, para luego pasar por su suave estomago con piercing incluido hasta llegar a su suave triangulito de dorados y suaves bellitos crespos y brillosos, abriendo asquerosamente su bocota de Tiranosaurio Rex, se zampo de un solo mordisco la pequeña ranurita que tenía Claudia al medio de sus piernas, movía su lengua como enajenado intentando penetrarla con ella lo máximo posible, se la sentía apretada y chiquitita, no se explicaba como solo hace unos cuantos minutos, aquella reducida grieta de amor se había comido en toda su extensión su gruesa tranca carnal, esto lo hacían calentar aún más.
El asqueroso hombre que ya se sentía dueño de aquel dorado cuerpo de la colegiala, ya se sentía enamorado de aquella rica panocha que se estaba comiendo, hacía mucho tiempo que no disfrutaba de los sabores de una zorra de 18 años, determinaba que era un excelente trato el que había hecho con Claudia, aun así pensaba que la rubia se había excedido un poco en el precio, por lo tanto era ahora cuando tenía que aprovechar que esto haya valido la pena.
La chupada de zorra continuaba, el vejete la veía ondular su pelvis al mismo compas en que él se la estaba comiendo , con sus bellas piernas bien abiertas y de par en par, con sus ojos cerrados, señal clara que la rubia lo estaba disfrutando, el con sus gruesos labios que no se separaban ni un centímetro de la panocha de Claudia, aspirando y comiéndose todas las aromáticas esencias que fluían desde el interior de su zorra sin desperdiciar nada, y con los desquiciantes gemidos y exclamaciones de placer que emitía la tierna chamaca, eran como la música de fondo, de aquella morbosa escena.
--Te gusta que te coma tu panochita putita calienta vergass, se atrYamile Riverosó a preguntar el viejo con cara de reptil, una vez que se separó de la sabrosa grieta para tomar un poco de aire…
--Siiiii ma…estro… siga…chu…pan…do…me…laaaaa!!, pedía Claudia sin dejar de menear su pelvis de arriba hacia abajo buscando los gruesos labios que tan gratificantemente le estaban haciendo sentir…
--Ya vas a ver trola de mierdaaa!! En un rato te voy a meter la verga hasta sacártela por la boca, para que no te queden ganas de andar haciendo tratos conmigo, le decía el maestro a la vez que se volvía a zampar la panocha, Claudia con sus cejas fruncidas por la calentura, solo pudo emitir un calenturiento…
--Ohhhhhh, al volver a sentir la pestilente boca de su profesor y el imaginarse la tremenda follada que le prometían.
Las lamidas en el tajo de Claudia de por si cada vez se volvían mas asquerosas, pero la rubia quería que el hombre no parara jamás de hacer lo que le estaba practicando, era la primera vez que se la chupaban, fue un momento imprYamile Riverossto que ya no aguantando mas tanto chapoteo de lengua en su íntimo reducto amatorio, que comenzó mover sus caderas y cintura como una culebra, además de bufar como una total poseída…
--Ahhhh ricoooooo…..profe….profeee…no pare... no pare…sigaaa comiéndomela todaaaa!!!, ohhhhh Diossssss!! diossssss!!, cosa que el profesor no se hiso de rogar y fue cuando se dio cuenta que la rubia había alcanzado un gran orgasmo, ya que sus poderosas piernas y muslos le atenazaron por la cabeza, oprimiéndolo con fuerzas hacia su jugosa panocha que no paraba de soltar líquidos que iban a dar en mayor parte a su boca y cara, quedando al final con todo su rostro de sapo mojado por las femeninas eyecciones.
Claudia quedo a patas abiertas, con su respiración totalmente acelerada y con su mirada vidriosa puesta hacia el techo, jamás había tenido un orgasmo de esas características, el vejete que recién se acordó de su tranca ya adolorida de tanto semen acumulado se montó nuevamente en las suavidades del cuerpo de aquella niña Diosa, y sin preguntar nada simplemente se lo metió hasta el fondo.
La rubia solamente se dejó que se lo metieran y al recordar lo prometido por su maestro, eso de metérselo tan adentro hasta sacárselo por la boca no dudo en secundarlo con el empeño, por lo que ya a los pocos minutos nuevamente estaban culiando como verdaderamente lo hacen un macho y una hembra.
El maestro Tulio se movía como desesperado sobre aquel femenino cuerpo de 18 años, a la vez que lengüeteaba asquerosamente el hermoso rostro de Claudia, la rubia quien se meneaba al mismo ritmo de su profesor y gozando con las lamidas en su cara, sentía que después de esta follada no podría volver hacerlo durante un mes, ninguno de sus novios había sido capaz de arrancarle un orgasmo real y verdadero, solamente no eran más que unos tímidos escalofríos los que había llegado a sentir con alguno de ellos , este viejo sí que era caliente pensaba, y sentía como su verga se adentraba en su cuerpo como si esta estuviera envuelta en llamas.
La culiada feroz continuaba, y así lo demostraban los sonoros crujidos de la rosadita cama de Claudia, que parecía que en cualquier momento se iba a quebrar, estos sonidos nunca antes ella los había escuchado, ya que se dijo que sus anteriores folladas había sido solamente por ahí y a la rapidita, pero ahora que los escuchaba en su propia habitación y en su cama misma determino que le encantaban estos sonidos, y hasta le parecía sentir que todos los muebles de su habitación vibraban y rechinaban al ritmo de la follada que le estaba pegando su profesor.
Estaba en estos pensamientos cuando sintió que el viejo se separaba de su cuerpo,
--Ahora te quiero en 4 patas pendejaaaaa!!, Claudia que se lo estaba pasando muy bien, no lo dudo mucho y rápidamente adopto la posición que ya había escuchado, y que ella nunca había practicado, pero que bien se sintió cuando ya estaba puesta, se sentía como una perra, le encanto sentirse meramente un , esos babosos que había tenido por novios no le llegaban ni a los talones a su maestrito que si sabía cómo follar a una mujer como ella.
El profesor Tulio ya desde hace rato dueño de la situación, se apegó al cuerpo de Claudia para apuntar y acomodar su verga a la entrada de la zorra, empujo con fuerzas hacia su interior metiéndosela hasta la misma raíz, la rubia lo recibió casi llorando por la emoción, bajo su cara para posarla en las rosadas sabanas de su camita, que ya estaban mojadas por tantas exudaciones corporales de ambos cuerpos, sentía en sus espaldas la blanda panza del macho que la estaba montando por detrás y que cada vez iba acelerando más los movimientos de meter y sacar.
El viejo la culiaba lentamente y en forma acompasada, la sensación de tener su verga metida en tan esplendoroso cuerpo lo tenían al borde de la eyaculación, pero el ver como se agitaban las carnes de la rubia por cada movimiento que el hacia lo aleonaban a querer seguir aguantando su explosión de semen, además que le daba miedo acabar dentro de la rubia, ya que la podía dejar embarazada y ahí sí que tendría problemas, hasta que de tanto mirarle el culo a aquella pendeja que tan rico le movía las nalgas dejándose follar, nuevamente el colmillo de la lujuria volvía a asomar en su caliente temperamento, mientras tanto la estudiante no paraba de gemir y moverse de lo tan rico que lo estaba pasando, sintió cuando el profe se la saco dejándola vaciá, a la vez que noto como este caliente viejo verde comenzaba a lamerle el culo, situación que le hicieron ver las estrellas, sentía como la lengua del hombre le lamia aquella parte prohibida, pero era tan rico que ella no podía negarse.
Cuando el vejete noto que el culo de la hembra ya estaba bien mojado con sus salivas puso en práctica la sodomítica idea que había cruzado por su mente, tomo firmemente a la chamaca por una de sus caderas para que no se le fuera a arrancar al momento de la irrupción, acomodo su vergota en el rosado anillito de Claudia y se propuso a empujar. La iba a encular.
Claudia quien se mantenía entretenida sintiendo como le lengüeteaban el culo, no pensó nunca lo que su profe se proponía a hacerle, y cuando se sintió bien sujeta de sus caderas y al sentir como la tranca de aquel asqueroso viejo se posaba tímidamente a la entrada del diminuto y virgen puntito que tenía por culo, por primera vez en la noche se sintió aterrada, por ahí nunca se la habían hecho, algo había escuchado, pero ella estaba lejos de querer experimentarlo en ninguna ocasión , ni siquiera con el más bello de los príncipes azules y menos con este auténtico viejo degenerado que ya se estaba preparando para penetrarla analmente…
--Nooooo!!, fue su primer grito desesperado al notar de lo que pretendían hacerle…
--Callate putaaaa!! Acuérdate que tenemos un trato…jajjaja!! Le decía el amorfo profesor….
--Maestro esto no entraba en el tratoooo!!...Ohhhhh! Uffffffffffffff!!, no em…pu…jeeee!!, le grito al sentir el primer apuntalamiento….
--Grita todo lo que quieres pendeja, porque ahora te voy a encularrrrr, jajajajaja!!... y trata de disfrutarlo, porque te doleraaa!! Te viso que no podrás cagar como en una semana, jjajajajaj, le decía y a la vez burlándose de aquella rubia estudiante que siempre se creyó superior a todos los demás…
--Maestro Tulioooo…por fi…no me la haga por ahiiiii….que me va a doler…., le pedía la Claudia, intentando mirar hacia atrás…
--Lo siento putaaaa, me has tenido más que caliente en todo este tiempo, y si quieres tu certificado del primer semestre , este es el precio…, diciendo esto último y tomando impulso con máxima concentración, el profesor empujo con fuerzas demenciales hacia el indefenso cuerpo de la rubia, logrando ensartarla por el culo de una y limpiamente.
--Buaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhh!!, Saquelooooooo!! Viejo degeneradoooo!! Por ahí no se haceeeeeee!! Fueron los fuertes y lamentosos alaridos que dio la hembra ensartada, una vez que se sintió enculada, sus ojos se abrieron como platos y sin ni siquiera pestañear, todo su curvilíneo cuerpo temblaba y no de placer, era solo un espantoso y dolor el que sentía la bella chamca.
Pero Claudia era una hembra brava, ella no lloraba, pero si opuso una encarnizada resistencia a no dejarse follar por el culo. El viejo solo reía y babeaba de tener ensartada por el culo a tan estupenda y buenota estudiante, la mantenía bien agarrada de sus caderas para que no se le fuera escapar, Claudia movía su culo en todas las direcciones posibles en su afán de que se la desclavaran, pero su enculador captor era más fuerte que ella, aun así la hembra lograba avanzar pequeños tramos en su huida, está más decir que todos estos movimientos y apretamientos de culo que hacia la rubia, lo único que lograban era que al vejete se le parara aún más la tranca, haciendo más difícil el desclavamiento…
--Saquelooo…saquelooooo…que me dueleeeee!! Viejo cochinoooo!!, vociferaba la adolorida joven,
--Jajajajaja!! Estas loca si crees que te la voy a sacar, aceptalo pendeja te acabo de encularrrr!!! Ahora sí que te tengo como yo queriaaa, como a una verdadera perraaa, has visto como culean los perrrosss?’, pues es así mismito como nos vamos a poner a culiar ahoraaaa, jajajajaja!!, a la vez que le decía esto último el profesor volvía apuntalarla para alojárselo lo más adentro posible…
--Ufffffffff, gemía Claudia sintiendo e imaginando lo profundo que se lo habían metido, hasta que ya viéndose perdida, y como ella era toda una zorra, se atrYamile Riverosó a decirle a su profe… --No se mueva que me dueleee!!, pero oiga profe, si yo me dejo encular como Ud. quiere, me haría los dos certificados este mismo semestre?, Ohhhh diosssss!!, gemía de dolor ante el mas mínimo movimiento que hacia su verdugo….
--Eso lo veremos después maldita perra interesada, todo dependerá a cómo te portes! aún queda mucha noche por delante!!, jajajajaja!!
Sabiendose bien enculada y teniendo claro que ya no tenía nada más que perder la rubia intento calmarse y dejar que su profe la enculara de la forma que él quisiera.
Don Tulio, sí que se la estaba pasando bien con aquella rubita, y todo por la codicia de la pendeja, pensaba y reía para sus adentros, sintiéndose ya con más confianza y notando que la pendeja se estaba ofreciendo a cooperar, se afianzo aún más firmemente a esas suaves caderas, para comenzar a culearla y hacerle ver cómo era follar con un verdadero potro en estado de celo, metiendo y sacando su verga del ensangrentado culo de Claudia.
El viejo se propuso a darse el máximo de placer posible no importándole el inmenso dolor que le estaba provocando a la adolorida colegiala, durante unas deliciosos clavadas anales, en donde la rubia gemía, gritaba y aguantaba estoicamente su suplicio, don Tulio pudo disfrutar de tan excelso disfrute, consiguiendo que su erección y placer se tornasen mucho más consistentes e intensos, de lo que era hasta ese momento.
--Toma perraaaa!! Esto eras lo que andabas buscando desde hace ratoooo!!
--Ahhhhh don Tuliooooo, más despacio que me va a descularrrrrrr!! le pedía con su rostro lleno de dolor. Ohhhhh!! Dueleee!! Dueleeeeeee!!
Durante unos buenos minutos en que el vejete no paraba de meter y sacar su verga del apretado esfínter de la rubia, y notando que la yegua a la cual estaba domando ya se mostraba más amansada, se propuso a parar un poco la faena , estaba bañado en sudor, al igual que Claudia que daba el aspecto de como si recién hubiese salido de darse una ducha , por todo lo majada en transpiración debido a los firmes y violentaos movimientos de verdadera apareamiento que le estaban pegando.
Cuando la estudiante noto que su maestro aminoraba el ritmo de la culiada, no supo el por qué a ella le dieron tantas ganas de seguir moviéndose, las clavadas eran netamente dolorosas, pero lo que la confundía era la sensación de sentir se una perra, de que la tuvieran puesta en 4 patas y que un horrendo vejestorio se la estuviera metiendo por el culo, hasta que ya no aguanto más y prácticamente le ordeno,
--Métamela entera viejo cabronnnn!!, hágame cagar el culo a vergazos pero siga metiendomelaaaaa!! Muevaseeeee enculemeeeeee!! Acaso eso no era lo queriaaa!!, Claudia al soltarle todo este tipo de peladeces a su profe, más se encabritaba y calentaba al mismo tiempo, al maestro Tulio casi le da in infarto cardiaco al notar el nivel de calentura de la hermosa joven que cada vez lo sorprendía mas por lo excelente que era para la cama, por lo que comenzó un frenético mete y saca que llegaba hasta lo más profundo de las entrañas de la rubia y caliente chamaca, --Ayyy profe me esta matandoooo , me va a mataarrrrrrrrrr!!! Ahhhhhh ricoooooooo probarlo por el culooooo profersorcitooooo!!
--Tomaaaaa!! Pinche trolaaaaa de mierdaaaaa!! Eres todaaa una putaaaaa!! Y eso que no querías perraaaa mal paridaaaaa!! Jajajaja!!
--Lo quieroooo!! Lo quierooooo… todoooooooo… adentro… del culoooooo!!, Claudia ya babeaba presa de la excitación y de todas sus desinhibiciones que había logrado sacar al dejar se encular por un asqueroso viejo con cara y ojos de sapo.
El vejete quien se mantenía bien ensartado al medio de las bien formadas nalgas de la estudiante, se inclinó por sobre sus espaldas buscándole la boca para besarla, la hembra lo recibió con desesperación, ambos se devoraban las bocas, quedando clogando gruesos hilos de babas cada vez que se separaban producto de los férreos movimientos que se daban, uno enterrando hacia adelante y la otra levantando aún más el culo para que aquella gruesa verga no fuese a salirse de sus interiores anales.
De pronto la Clau se quedó quieta y con sus ojos bien abiertos, el viejo Tulio noto esta extraña reacción de la caliente y rubia jovencita, vio que desde su cintura hacia abajo la pendeja temblaba, el temblor de nalgas cada vez se hacía más encabritado, por lo que dedujo que la chamaca estaba al borde de su primer orgasmo por el culo, hasta que la escucho bramar,
--Ohhh Diosssss!! …Ohhhhh Diosssss!!... Que es esto Dios mioooooo!!...profe….me estoy corrien…dooooo..por…el cu…looooooo!!
El viejo maestro de escuela, al notar en el estado que tenía a una de sus más bellas estudiantes, clavo su virilidad hasta lo más profundo se sus viseras, arrancándole un sonoro y prolongado grito de placer, a la vez que notaba los fuertes espasmos y contracciones anales en que la joven inconscientemente le apretaba la verga, mientras mas fuerte gritaba la chamaca , más profundo se lo metía…
--Te gusta yegua de mierdaaaa!! Te gusta que te metan vergaaaa por el culoooo!!
--Siiiiiiiiiiiii…profe ahhhhhhh, ohhhh, mmmmmm, ayyyyyy!! me sigo corriendoooooo, ohhhhh Diosssssss, siento que meoooooo! Siento que me meooooooo!! Ricoooooooooooo!!
El vejete se la saco de una, Claudia se desplomó en su cama presa de inYamile Riverostables contracciones y espasmos de placer, don Tulio la miraba masajeándose la verga con una cara de auténtico degenerado, la veía con sus ojos blancos como una posesa, su enervante calentura se plasmaba, en las abundantes cascadas de flujos y líquidos femeninos que emanaban desde sus entrañas y que salían desde su zorrita y por el culo al mismo tiempo, entre gritos y gemidos de auténtico placer, las contracciones fueron pasando quedando casi aturdida con pequeños tiritones en su escultural cuerpazo, cuando ya todo había pasado para Claudia y mientras aun no volvía a su estado normal levanto su carita que más parecía la de un femenino demonio recién sacado del infierno, por el rictus de puta recién saciada en que la había dejado el maestro Tulio, este ya no aguantado mas tanta lujuria, y dándole rienda suelta a uno de sus más desequilibrados deseos para esa noche de impúdica obscenidad, tomo delante de los ojos de Claudia uno de los vasos en que anteriormente habían tomado Tequila y pasándole este a la aún caliente muchacha, esta lo puso en la punta de su verga, hasta que por fin para el vejete llegaba su momento del orgasmo,
--Arrrrrrrggggghhhhhhh!! Gruño mientras copiosas descargas de abundante semen blanco lechoso y caliente se iban depositando en el vaso sostenido por Claudia, quien no perdía detalles, los vio salir expulsados con fuerzas, el primero casi llego a un cuarto de vaso, seguido por tres de la misma potencia e intensidad y seguido por otros cuatro que a medida que salían eyectados iban disminuyendo en poderío.
Claudia quedo fascinada por la gran cantidad de semen que había juntado en el vaso y que ya sabía que era solo para ella, su espesura, su blanquecino y a veces semi transparente color que tenía aquel liquido potente y varonil, se apoderaron de sus más insanos deseos de hembra, y ella el saberse la causante de toda esa expulsión de verdadera leche de macho, se bajó de la cama en forma casi desesperada quedando de rodillas ante el maestro Tulio, y teniendo aun el vaso lleno de semen en sus manos, en forma instintiva procedió a bebérselo y siempre mirando con sus ojos de viciosa a la degenerada cara de su profesor.
El maestro Tulio miraba la función que le estaba dando esa putilla, con cara de ser un feliz y autentico degenerado, se fijaba en como el botoncito de la garganta de Claudia subía y bajaba al estar bebiendo y tragando todo su semen, hasta que la rubia colegiala lo vació todo, se había bebido hasta la última gota, para luego tirar el vaso hacia cualquier parte y quedar mirando al que había sido su macho con una sonriente cara de puta recién estrenada, ala ves que se sobaba su vientre a la altura de su pierceng,
--Y ahora profe… me gane mis dos certificados, le consultaba haciendo ademanes de niña mimada…
--Si pendejaaaa, el primero ya te lo ganaste! y con creces!!, jejejeje, le iba diciendo a la vez que la tomaba de sus poderosas formas para volver a dejarla acostada en la cama, el vejete se acostó con ella y tapo a ambos con los gruesos cobertores, para luego apagar la luz de la lámpara y abrazarse a su curvilíneo cuerpo desnudo de la Claudia, y una vez ya estando en total oscuridad dentro de la habitación, le dijo--Ahora que ya estamos acostados en la cama como marido y mujer vamos a discutir lo de tu segundo certificado putita, jejeje…tal como tú lo dijiste!!
-Si pendejaaaa, el primero ya te lo ganaste! y con creces!!, jejejeje, le iba diciendo el maestro Tulio a Claudia a la vez que la tomaba de sus poderosas formas para volver a dejarla acostada en la cama, el vejete profesor se acostó con ella y tapo a ambos con los gruesos cobertores...
YAMILE RIVEROS 11
Sentada a la derecha en el destartalado coche del siniestro don Pedro, Yamile Riveros iba contrariada y aun espantada por lo sucedido recientemente, no podía creer en la terrible situación que había vivido, había sido violada, pensaba en como su virginidad había sido arrebatada por un desalmado, asqueroso y vil vejete. Recordaba que varias horas antes se encontraba dormida en la seguridad y calidez de su habitación cuando fue interrumpida por su mejor amiga invitándola a la Feria, fue en esto que al acordarse de Claudia pensó en avisarle que ya iba de regreso y que tal vez en 30 minutos estaría llegando a su casa, decidió enviarle un mensaje,
--Y a quien le enviás mensajes a esta hora pendeja!?, le vocifero don Pedro mientras manejaba y cuando se percató que Yamile Riveros estaba enviando un mensaje desde su teléfono, la pobre que aún estaba muy apenada por la traumática experiencia sufrida en manos de aquel iracundo vejestorio, le contesto con la verdad para que él no se volviera a enojar y le pegara nuevamente,
--A una amiga… se suponía que andábamos juntas en la feria…, yo la estaba esperando a ella… cuando lo conocí a Ud…. y sus amigos, le respondió con voz temblorosa.
--Ahhh sí!, jajajaja!! te refieres a la otra putilla que andaba contigo en busca de verga, la rubia jajajaja!!, si!... la recuerdo bien!, no estaría mal que me la presentaras…que tal si un día de estos nos pegamos una fiestecita entre los tres… que me dices lindura, acaso no te parece una buena idea?,
--No lo creo don Pedro, no sé si ella quisiera ir a una fiesta conmigo y con Ud., además que ella tiene novio y… El mecánico la interrumpió y no la dejo terminar lo que le estaba diciendo, y al estar en un semáforo en rojo aprovecho esta situación para intimidar a la pobre y asustada jovencita, quería que una vez que él ya se retirara dejándola en su casa, no se le olvidara quien era desde este día su único y verdadero dueño,
--Me importa una verga si ella tiene novio, o está casada o soltera…!!!, le gritó el vejete, --El caso es que cuando yo te lo diga tú vas y me la traes!!! Acabo de decidir que me la quiero coger!!! Y tú me ayudaras!!! Entendiste escuincla de mierda!!! Diciéndole esto último la tomo bruscamente de sus cabellos y la jaloneo hacia su cuerpo para que ella lo mirara directamente a su cara, para luego continuar…--Te recuerdo que desde hoy pasaste a ser mi mujer! Mi puta personal!! Serás mi zorraaa!!! Así que andate preparando pendeja, en un tiempo más te iras a vivir conmigo y nos casaremos!!! Jajajaja!!! Te llenare de chamacos!!! Jajajaja!!! Pero antes te hare putiar por las calles… quiero que por las noches andes culiando y ganando dinero para mi…jajajaja!!! Además te deberás abrir de patas y culiar con todos mis amigos y todas las veces que yo te lo ordene, así que dejate de contestarme estupideces, te queda claro grandísima putaaaa!!!
Yamile Riveros quien estaba totalmente espantada con todos los planes que tenía don Pedro para su futuro, estaba al borde del llanto le veía las arrugas de su cara, ese destello en sus enrojecidos ojos le daban un aspecto demoniaco, ni que decir de sus cariadas encías sumado a varias piezas dentales que no estaban en su lugar, el vejete continuaba, --Y tú tienes la culpa pendeja, nadie te mando a andar por ahí levantando vergas a diestra y siniestra, así que te lo repito… cuando yo te ordene algo tu solo debes obedecer, o acaso se te olvido que tengo en mi poder tu certificado oficial de puta… por lo tanto desde ahora tu solo vives para darme dinero y para mi verga… jajajaja!!! Diciendo esto último la bajo violentamente frotándole la cara contra su tranca, para luego de unos breves segundos de restreguéo levantarla y arrojarla hacia el lado del copiloto.
Yamile Riveros con todo su pelo alborotado y respirando agitadamente solo lo quedo mirando con su carita de asustada, no entendía ni comprendía por que este viejo se creía su dueño, aunque sabía que si no le obedecía en lo que él le solicitara su vida estaría perdida, como le podría explicar a su madre y a su abuelito del porque le habían cursado una infracción por ejercer la prostitución en la vía publica, o que dirían sus maestros y compañeros del colegio al enterarse que ella… la que siempre destacaba con excelentes calificaciones salía por las noches a prostituirse, esto era mentira!!, pero como podría explicárselo a todos …no le creerían, y por Dios!!!, pensó de pronto, con qué cara podría ver a Rodrigo su novio si este llegaba a enterarse de lo que supuestamente ella hacía por las noches y a espaldas de todos sus seres queridos, miro casi con rabia al hombre culpable de toda su desdicha, y que más encima solo hace un par de horas le había robado su virginidad violándola adentro de una oficina con cama que había al interior de un taller mecánico, no le quedaba más opción… tenía que obedecer y hacer caso en todo de lo que le ordenara don Pedro, se consolaba a medias pensando que tal vez así podría seguir llevando una vida normal.
Una hora antes en la casa de Claudia, paradójicamente y por esos misterios de la vida acontecía una situación no igual pero si muy similar a lo que anteriormente le habían solicitado a Yamile Riveros, pero ahora era a la hermosa Claudia a quien le solicitaban colaboración para que otro viejo degenerado y sinvergüenza se beneficiara con el despampanante cuerpo de nuestra candorosa e inigualable Yamile Riveroscita.
Estando aun acostados, Claudia y su horrendo profesor con cara de sapo, ambos desnudos y abrazados después de haber descansado unos buenos minutos tras la bestial follada que el obeso maestro y la escultural estudiante se habían pegado, fue la rubia y alocada colegiala quien toco primero el tema de cuál sería el precio que tendría que pagar por su segundo certificado de notas.
--Y profesorcito? Me va a decir que es lo que tendré que hacer ahora para ganarme mi segundo certificado?, le consultaba intentando ser lo más candorosa y sexi que pudiera, y esto no le costaba mucho, pues la jovencita era muy atractiva para los ojos de cualquier macho en estado de calentura.
--Claro que te lo diré ricura, jejeje, veras rubita…, al viejo cuando hablaba le caían vistosas gotas de babas por ambos lados de sus gruesos labios de batracio, --Fue verdaderamente un placer haberte reventado el culenque, jejeje! así que tu primer certificado ya te lo ganaste, jejeje, pero siendo realista y viendo las serias complicaciones que esta situación me podrían traer en el colegio si es que alguien me descubriera, esto hace que el precio por tu segundo certificado sea algo un poco más elevado, no sé si me entiendes lindura, jejeje…
--Pues diga no más don Tulito… para que soy buenita…todo por mi segundo certificado de notas, jijiji…le dijo coquetamente a la vez que le prodigaba una serie de eróticos besos en las peludas y canosas tetillas fofas del vejete con cara de sapo.
Al sexagenario maestro el solo hecho de estar acostado desnudo con una de sus más potentes y hermosas alumnas y por la emoción y excitación que le causaba la desvergonzada solicitud que estaba a punto de soltarle a la curvilínea Claudia ya se le estaba volviendo a parar la verga, por lo que sin pensarlo dos veces se dio a poner en conocimiento cual sería el precio por el segundo documento en cuestión.
--Escuchame bien chamaca, ahora te voy a decir cuál es el precio por lo que me pides, este tiene varias condiciones…deberás pensarla bien porque o si no hasta aquí no más lo dejamos, claro que antes de irme sea cual sea tu respuesta igual te pegare una última follada, jejeje. Claudia escuchaba atentamente. --En vista de lo rica y buenota que eres para culiar… quiero que estos 5 meses que restan para que termine el año escolar nos sigamos acostando por lo menos dos días a la semana.
Claudia al escuchar la infamia que pretendía su profesor en forma casi automática se separó del grasoso cuerpo de don Tulio, este viejo de mierda se estaba excediendo en el precio pensaba la ahora atribulada chiquilla, una cosa era que ella se haya calentado por culpa de los tragos y por el interés de sacarle a como dé lugar los certificados de notas acostándose con él, pero otra muy diferente era que ella siguiera dejándose follar si como fuesen novios, aparte de que era inmensamente asqueroso y feo.
--Noooo!!…yo no me seguiré acostando con Usted!! O sea… el trato era solo por hoy!!! Exclamo Claudia quien ante tal desvergonzada solicitud volvió de una a la cordura.
El degenerado profesor al notar que su alumna daba muestras de no querer acceder a lo que él estaba solicitando se adelantó y la atrajo nuevamente hacia su cuerpo oprimiendo las suaves tetas de Claudia contra su suelto y peludo pecho canoso…
--Está bien, le contesto el vejete, --Si no quieres no hay problema… pero eso no impedirá a que te culie nuevamente antes de irme, jejeje…el lunes puedes pasar a buscar tu certificado, pero el otro lamentablemente no te lo puedo dar, esto se lo decía con la única razón de intentar tocar la parte interesada de la mente de la muchacha, luego comenzó a darle una serie de asquerosas lamidas en el lozano rostro de Claudia, la colegiala ahora sentía asco al estar en tales condiciones con un viejo con cara de reptil y de casi sesenta años de edad, y para rematarla tenerlo acostado desnudo en su propia cama y con ella en iguales condiciones.
La Claudia pensaba muy aconjodamente que la anterior follada con su maestro no había servido de mucho, si bien ya tenía el certificado del primer semestre, este no servía de mucho si no obtenía el segundo, pero el precio que estaba poniendo aquel asqueroso hombre con ojos hinchados era demasiado alto, ella no se veía acostándose dos veces a la semana con aquel perverso y degenerado vejete, sabía que el hombre ya se estaba preparando para volver a metérselo, por lo que la estudiante de 18 años ya se acondicionaba psicológicamente para un nuevo coito, había asumido que tendría que volver a culiar con su maestro.
Llevaban varios minutos en en que el viejo la punteaba haciendo movimientos de como si ya la estuviera culiando, la cama ya crujía exquisitamente también preparándose para lo que se venía.
El viejo con una de sus manos le apretaba sus mandíbulas haciendo que ella abriera su boca para el introducir su mórbida y pegajosa lengua para luego soltarla, y por debajo de las cobijas pasear a su regalado antojo sus sebosas manos y recorrer las suavidades del femenino y joven cuerpo que tenía a su alcance, la rubia colegiala experimentaba en su plano vientre como la sudada y blanda panza del vejete se movía hacia todos lados en el afán de su dueño por mantenerse pegado lo más posible a ella, y en el momento que sintió la dura y caliente punta de la vergota de su amante ocasional entrar a medias en su núbil vagina y el estar siendo nuevamente acomodada de espaldas para dar paso al apareamiento sexual, se dijo para sí misma que tal sacrificio debía valer la pena, ya no había nada que perder y si un certificado por ganar…
--Acepto!! Le soltó de una y claramente.
El viejo quedo paralizado por unos momentos ante la mágica palabra de la descocada e interesada jovenzuela…
--Jejeje…pero mira que interesada me saliste putita mal criada…el viejo se mantenía enterrado con solo un cuarto de verga en la dorada y apretada panocha de la Clau, --Pero veras cuando me interrumpiste hace un rato yo aún no terminaba de decirte cual es el precio… aún faltaba la otra mitad y la más importante lindura…estas segura que podrás cumplir con lo que te pida?…
--Le cumpliré profe…pero es que me da miedo… quedar embarazada, le dijo con sinceridad y entre cortadamente, a la vez que le iba abriendo sus piernas para que el viejo quedara montado más cómodamente, la rubia continuo…--La verdad… es que necesito el segundo certificado…, pero dígame… cual es la segunda parte del trato?, consultaba con sus ojos cerrados y con sus bellas pernas abiertas experimentando el delicioso cosquilleo que le causaba el tener metida a medias aquella gorda tranca de macho,
--Pus…si te da miedo que te pueda preñar… todas las semanas te daré un dinerito para que te compres pastillas, jejeje ves?, todo tiene solución en esta vida… ahora te diré la segunda parte de mis condiciones putita…, el vejete metió sus manos por debajo de los hombros de Claudia para afianzársela mejor, y midió bien sus palabras para que la estudiante lo apañara en su nueva solicitud… --Tengo entendido que tú eres muy amiga de la Yamile Riveros…
--Así es… pero… que tiene que ver mi amiga Yamile Riveros con todo esto? Claudia sentía como la gruesa verga del profe le habría la vagina, ya que esta estaba adquiriendo una dureza y rigidez aún más mayor que en la follada anterior, no quería desconcentrarse de aquel rico estado, y era lógico si el viejo se calentaba hasta más no poder con solo pronunciar el nombre Yamile Riveros.
¡-Aunque no creas tu amiga keeps que ver en todo esto, el viejo se lo metió otro poco, --Ohhhh pero que calentita es tu panocha por in cosita ricaaaaa!!!
Claudia sintío el leve aprendizaje de verga, pero aún no estaba del todo caliente, eso sí que igual estaba sintiendo muy rico. Su profesor la tenía intrigada todavía se preguntaba que tenía que ver Yamile Riveros con todo esto.
--Pero vamos ... dígame! ... que es lo que quiere saber de ella ?, quería decidir una a medias ensartada Claudia ...
--Quiero ... que me ayudes a ... culiarmelaaaaaa !!, diciendo esto último el vejete empleo con fuerzas al ya entregado cuerpo de la joven estudiante quien recibe y hotel en su vagina la verga del maestro Tulio en todo su grosor y longitudinal.
Claudia quedo impactada con semejante solicitud, mil ideas pasaban por su mente, a la vez que sentía como el viejo profesor se echaba sobre su cuerpo y comenzaba slowly a moverse metiéndoello y sacándoelo en forma aceitosa acompasada intención de aprovechar y de sentir al máximo las gratifices
La ensartada estudiante intentaba por todos los medios posibles ordenar las ideas, se preguntaba porque este viejo caliente le hace tal solicitud, Yamile Riveros was su mejor amiga y por nada del mundo haría un barbaridad del calibre que le estaba solicitando el mismo rejete que en esos momentos le ten
Las ideas revoloteaban como alocadas marinas en su mente, meditaba en la vileza de tal solicitud, como así mismo mismo veía difusas imágenes de su amiga del alma desnuda y ensartada en la verga de aquél hombre tan feo y degenerado, no supo por qué razón el solo imaginársela en tale para que su profe se la metiera más profundo de lo que ya se la tenía metida y para poder así sentir más rico aun de lo que ya estaba sintiendo.
